POR ANTONIO BOTÍAS SAUS, CRONISTA OFICIAL DE MURCIA

Durante 25 largos años, allá por el siglo XIII, Ibn Mardanis, el Rey Lobo, Señor de Murcia, Valencia, Játiva y Denia, logró contener el empuje africano sobre sus territorios y hasta sitió, que se escribe pronto, Granada, Córdoba y Sevilla. Mardanis, sobre quien algunos autores advierten de que su apellido real era Martínez protagonizó un próspero reinado (1147-1172) cuyos restos, en parte, aún pueden admirarse. Es el caso de la fortaleza del Castillejo, en Monteagudo, que hoy se desmorona, o de su palacio de recreo, después convento de Las Claras, una construcción situada más allá de las murallas de la ciudad, en pleno arrabal de La Arrixaca. Junto a su puerta circulaba (y circula, soterrada) la antigua Acequia Mayor Aljufía. Siguiendo este cauce, a unos cincuenta metros, está ubicado el Palacio de San Esteban, sede del Gobierno regional. Y allí se encuentra el yacimiento, quizá, más espectacular de toda Europa. Sobre él se han escrito, desde que se descubriera hace 6 años, toda suerte de crónicas. Pero, ¿realmente sabemos qué es y qué futuro le aguarda? Aquí, en homenaje al Rey Lobo, brindo algunas claves.

¿Qué es el yacimiento de San Esteban?

Es un yacimiento arqueológico ubicado en el corazón de Murcia (España) que ocupa una extensión de unos diez mil metros cuadrados. Fue descubierto durante las excavaciones para la construcción de un aparcamiento subterráneo. Comprende un barrio islámico del siglo XIII, con restos de los dos siglos anteriores, en parte por excavar, y es conocido como Arrabal de la Arrixaca Nueva (o del Norte).

¿Qué tesoros arqueológicos comprende?

En diciembre de 2009, una treintena profesores e investigadores de la Universidad de Murcia (UMU) enviaron una carta al Rector donde le advertían de que el yacimiento incluía hasta 100 edificaciones. En ella destacaban que se habían encontrado 5 palacios, uno de ellos de 500 metros cuadrados, una pequeña mezquita y una necrópolis. Una trama urbana andalusí única en Europa. Las plantas de las casas, como expresa el propio ayuntamiento son reflejo de los modelos característicos islámicos, con patios centrales ajardinados, la estancia principal situada al Norte y la entrada acodada desde la calle para reforzar la intimidad del interior de la vivienda. Sobre los recintos palaciales, si bien no se trata de palacios como tales, estas viviendas son de grandes proporciones y, por tanto, corresponderían a una clase acomodada, posiblemente de altos funcionarios relacionados con el palacio que sí se ubicaría bajo el actual Palacio de San Esteban. Junto a las viviendas, resulta destacable la existencia de un sector de carácter religioso, con una zona de necrópolis y, quizá, un oratorio o pequeña mezquita.

¿Qué aporta a Murcia?

La espléndida trama urbana descubierta ofrecerá a los científicos profundizar en la arqueología medieval, pues ofrece una visión de conjunto, única en el mundo, del espacio urbano de la época. Sin contar con el interés de grandes arquitectos por ofrecer soluciones y el lógico (y posterior) reclamo turístico.

¿Qué pasó en los juzgados con este proyecto?

En junio de 2014, la Audiencia Provincial de Murcia concluyó que Enrique Ujaldón, director general de Bienes Culturales, y Ángel Iniesta, técnico del Servicio de Patrimonio Histórico de la Comunidad, no cometieron prevaricación en las tareas de conservación de los restos arqueológicos. Los magistrados de la Sección Tercera estimaron el recurso de apelación contra un auto del Juzgado de Instrucción número 1 para que se abriera juicio oral, y ordenaron el sobreseimiento provisional y archivo de la causa abierta contra ambos, sin posibilidad de recurso.

En qué estado se encuentran los restos?

El Ayuntamiento de Murcia, ante la presión vecinal, impulsó en su día trabajos preventivos de conservación del yacimiento. Consistieron en apuntalar los muros, fumigar con herbicidas y cubrirlo todo con geotextil, una tela protectora sujetada con una capa de grava. Así permanecen hasta ahora, aunque se han sucedido las protestas, tanto vecinales como académicas, ante una protección a todas luces insuficiente. Cada vez que llueve, el yacimiento se convierte en una inmensa charca.

¿Qué proyectos se presentaron al concurso de ideas para su restauración?

En febrero de 2012 se hizo público, a bombo y platillo, los 6 proyectos ganadores para la restauración del yacimiento. Cada uno de ellos, de entrada, obtuvo 8.640 euros y la posibilidad de que su proyecto finalmente se licitara. Los ganadores fueron arquitectos de reconocido prestigio con estudio profesional en Murcia, Cartagena, Sevilla y Valencia. Uno de los proyectos, por ejemplo, era obra de Martín Lejarraga. Ahora se ha anunciado que la solución será un compendio de todas las ideas.

¿Qué proponen ahora?

Seis años más tarde, el Ayuntamiento de Murcia y la Comunidad Autónoma presentan un plan director, supervisado por expertos, para recuperar el arrabal. El plan incluye, además, el entorno, el Palacio de San Esteban y la desacralizada iglesia renacentista de San Esteban y sus retablos, escondidos tras la increíble transformación del espacio en sala de exposiciones. Para ello han creado una web (recuperamossanesteban.es). La web incluye un vídeo, rudimentario donde los haya, que explica el proyecto. O que intenta explicarlo, porque apenas destaca detalle alguno.

¿Cuánto costará el proyecto?

Según anunciaron desde el Ayuntamiento de Murcia y la Comunidad Autónoma, el proyecto de recuperación cuesta unos 15 millones de euros. Aunque solo parecen seguros los 5 millones que intentará aportar el Consistorio murciano. El resto, según cuentan, vendrán por otros cauces, entre ellos la Unión Europea. Eso, sin contar que aún no existe plan director –todavía no lo han sacado a concurso- que justifique realmente esa cantidad.

¿Cuáles son los siguientes pasos?

Ayuntamiento y Comunidad Autónoma anuncian que, en las próximas semanas, se elaborará un pliego de condiciones para convocar un concurso público. El objetivo es elaborar lo que llaman “plan director” del proyecto. Además, consideran que durante los primeros meses de 2016 será adjudicado y la empresa adjudicataria será asesorada (aún no se sabe cómo y de qué forma) por expertos de diversos ámbitos. El problema es determinar varios puntos. Y el primero es si el Partido Popular en La Glorieta, en minoría sin el apoyo del resto de partidos, podrá aprobar esa partida. El segundo, si la Comunidad Autónoma aportará algo, visto que también necesitan el apoyo de Ciudadanos. Y el tercero es conseguir financiación de la Unión Europea en tan poco tiempo.

¿Es un proyecto viable o un anuncio preelectoral?

Aunque el actual alcalde de Murcia, José Ballesta (PP), anunció durante su campaña electoral que en seis meses habría solucionado el problema de San Esteban, no imaginaba que ese periodo de tiempo concluiría, precisamente, con los próximos comicios generales de diciembre. Por tanto, el anuncio del proyecto, muy a su pesar, no está exento de críticas ‘pre-electorales’. Por ejemplo, el grupo municipal Ahora Murcia ha denunciado que la rehabilitación del yacimiento “sólo cuenta con un tercio de la financiación garantizada”. “Se prevé un coste de 15 millones de euros, pero solo el Ayuntamiento se ha comprometido a poner una cantidad, 5 millones”, señaló hace unos días la edil Ángeles Micol. Y el portavoz del Grupo Municipal Socialista, José Ignacio Gras, consideró que “es un capítulo más de la larga lista de promesas con las que nos tiene acostumbrado el alcalde-anuncio, cuando tan solo se trata de la mención de que el año próximo se va a contratar un Plan Director”. Más atinado anduvo Nacho Tornel, portavoz de Cambiemos Murcia, quien resaltó que “no podemos entender cómo no se ha elaborado y presentado ya este plan, que es el instrumento más necesario para impulsar la recuperación del espacio y, sin embargo, el equipo de Gobierno sí sepa que el proyecto costará alrededor de 15 millones de euros”. Política al margen (no hay otro camino para que se llegue a buen puerto) hasta el día de hoy el proyecto es solo una (hermosa) declaración de intenciones. Las próximas semanas serán cruciales para discernir cuánto de paja y cuánto de euros se ponen sobre la mesa. O sobre los históricos muros.

Fuente: http://blogs.laverdad.es/