POR MIGUEL GALLEGO ZAPATA, CRONISTA OFICIAL DE SAN JAVIER (MURCIA)

Ya es un tópico decir la conozco desde que nació, pero es que en este caso podría decir que la conozco desde antes de nacer, me explico, conocía a sus padres cuando eran novios, hasta podría presumir de ser su pariente pues su abuelo, José María Gómez Gallego, que comerciaba en azafrán, era primo de mi abuelo.

Desde muy joven fue novia de mi amigo José Murcia Jiménez, gran persona y mejor estudiante que, cuando en San Javier no había aún Institutos y era tan difícil estudiar, después de una vida ejemplar, buen hijo, buen esposo, buen padre, buen abuelo, y por qué no decirlo buen yerno, buen amigo de sus amigos y un excelente caballero cristiano, tras una vida profesional impecable acabó retirándose como Comandante de Sanidad en la Academia General del Aire de San Javier, donde había transcurrido su vida militar.

“Fina la de Murcia”, como la conocemos todos, venía por mi casa cuando nuestras hijas “jugaban” a ser damas infantiles en las fiestas del Santo y había que prepararles “los majos”, su hija fue reina infantil, después y con ocasión de que mi mujer era Tesorera de las Amas de Casa, se reunían para estudiar, como comprar las telas para los disfraces de las diferentes fiestas, gastando lo menos posible, cobrar después a cada una de las participantes, y por las noches trabajando en su confección, hasta altas horas. Todo ello con el mayor desinterés y una ilusión encomiable.

Ha llevado los contratiempos de su casa, una casa donde reinó siempre el amor y la concordia, con una abnegación admirable, en definitiva se trata de una mujer ejemplar.

Hoy, cuando La Opinión de Murcia nos trae la gran noticia que la Federación Murciana de Asociaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios, ThaderConsumo, con motivo de su 50 aniversario, rinde homenaje a 27 líderes, amas de casa “cuya callada y abnegada labor durante años, merece un reconocimiento” y, entre ellas, está Josefa Montesinos, nuestra ilustre paisana, recibimos una gran alegría y por ello te felicitamos muy efusivamente y a quienes tuvieron el acierto de proponerte para tan merecido galardón.

Fina, estamos orgullosos de ti y celebramos hayas sido tu la que ha representado a nuestras mujeres, pues en ti, precisamente en ti, se dan todos los valores necesarios para ello.