POR GABRIEL SEGURA HERRERO, CRONISTA OFICIAL DE ELDA (ALICANTE)
Tras varios años de construcción, un miércoles 19 de mayo de hace 268 años, entre las diez y las once de la mañana, se colocaba la imagen de la Virgen de la Salud en la hornacina que coronaba la conocida desde entonces como “puerta de la Virgen” en la iglesia parroquial de Santa Ana.
La apertura de una nueva puerta en la iglesia quedó vinculada a la construcción de la capilla de la Virgen (1747-1751), ejecutándose al mismo tiempo. Ambas fueron construidas según diseño y cálculo de Vicente Mingot (1698-1772), arquitecto alicantino y principal responsable de la construcción del actual ayuntamiento de Alicante, que por entonces ya se había iniciado. Para dirigir y supervisar personalmente la construcción de la capilla y la puerta, Vicente Mingot y su familia se trasladaron a vivir a Elda durante esos cuatro años.
Por el recibo expedido de sus honorarios, sabemos que el arquitecto cobró un total de 897 libras, 4 sueldos y 10 dineros (9.292 reales de vellón), a razón de 6 reales diarios por su trabajo y el de un aprendiz que le ayudaba en la dirección de obra.
La portada íntegra fue realizada en piedra de las canteras de Bateig, siendo talladas las columnas, capiteles y demás adornos, junto con las imágenes de San Joaquín y de Santa Ana, así como el ángel con trompeta que corona la portada, por el escultor Ignacio Estevan. Todo ello por el precio de 160 libras. Mientras que la figura en bulto redondo de la Virgen de la Salud, que presidía la portada, fue tallada por el escultor Antonio Perales; siéndole abonada en tal concepto la módica cantidad de 25 libras (375 reales).
Al poco tiempo, el dorador José Moñino procedió a dorar tanto la corona y los cantos del ropaje de la Virgen como la corona del Niño Jesús y la trompeta del ángel. Trabajos por los que cobró un total de 18 libras.
La villa de Elda enriquecía así su patrimonio histórico y artístico con una magnífica portada barroca, de similar traza y composición que la puerta de la capilla de la Virgen del Remedio en la iglesia parroquial de San Juan Bautista de Monóvar. Sucesivas generaciones de eldenses pudieron contemplar durante 186 años esta magnífica portada. Sin embargo, los trágicos acontecimientos desarrollados en nuestra ciudad a partir del 18 de julio de 1936 supusieron la destrucción por completo no solo del templo barroco de Santa Ana, sino de todos sus tesoros artísticos custodiados en él desde el siglo XVI.
Fuente: https://www.valledeelda.com/