MANUEL LÓPEZ FERNÁNDEZ, CRONISTA OFICIAL DE VILLANUEVA DEL ARZOBISPO (JAÉN).
En la época de los años cincuenta al sesenta fueron frecuentes la llegada de Misiones a la localidad, en donde cambiaba la vida, que se llenaba de religiosidad. En ocasiones solían bajar a la patrona a la Iglesia Parroquial. En otro momento la Imagen de la Virgen recorrió todos los barrios de la localidad, con una apretada actividad, y pasando un día en cada barrio, en donde artísticos altares y locales espaciosos daban acogida a la Patrona, con veladas de custodia y rezos durante toda la noche, finalizando con la Eucaristía, para el traslado a otro lugar. Emociones y sentimientos afloraron en cada lugar, rostros llenos de vida y de esperanza.
Como recuerdo de su visita a este barrio, en un pequeño jardín, construyeron una singular hornacina, que fue adornada con una reproducción de la Virgen de la Fuensanta. Ocurrió en mayo de 1964.
La imagen recibía como rezos el trabajo de los molineros, y los aromas del aceite bíblico de la Cooperativa, cercana.
Después el abandono y el gamberrismo dejaron su huella en este rincón en donde sólo podíamos leer la placa alusiva. La imagen, tuvo que retirarse y se conservaba en un domicilio particular.
Un grupo de jóvenes se responsabilizaron hace unos años en exponer la imagen en su lugar, colocando un cristal, para protección y evitar que el agua pueda deteriorar la imagen, limpiando, y cuidando el jardín y hornacina, manteniendo parte de nuestras tradiciones y religiosidad. Fue Alejandro Ruiz, que viendo el estado lamentable del lugar, habló con las vecinas, y junto con unos amigos, Jaime Martínez, Aleix Herreros, Israel Medina y Mónica López … quienes pusieron su ilusión en la restauración del lugar y poner la imagen de nuevo. Aprovechando el mes de mayo, en 2018 pidieron al sacerdote Hildebrando Escobar, la bendición del lugar y entronización de la imagen.
FUENTE EL CRONISTA