POR ANTONIO LUIS GALIANO PÉREZ, CRONISTA OFICIAL DE ORIHUELA (ALICANTE)
Hace cuatro noches, en esos momentos en que para intentar coger el sueño, me pongo frente a la “caja tonta” (ahora más bien con otra forma), buscando alguna película para distraerme y sin problemas, tuve la fortuna de encontrar un reportaje dedicado a los eternos “Manolo y Ramón”, el Dúo Dinámico. Francamente pase un rato divertido recordando algunas letras de sus canciones que han hecho época y que estuvieron presentes en nuestra juventud y que se han mantenido hasta ahora. Sin ir más lejos, ese “Resistiré”, que ha pasado a ser un himno durante la pandemia.
Al concluir el reportaje, se inició una tertulia y se abordó un tema sobre una de sus canciones (“Quince años tiene mi amor”), que por lo visto se ve actualmente criticada por algunos de los adictos a las redes, por considerarla “políticamente incorrecta”. Y, yo pienso, si es que sus padres o abuelos no vivieron románticamente ese enamoramiento a los tres lustros bailando ese rok, y que, tal vez, esa niña “tan divina y colosal”, con una mirada que “no se podía aguantar”, terminó siendo la madre o la abuela, de ese jardín del que fue o es la mejor rosa. O sea, de la familia. La verdad, es que no sé a dónde vamos a llegar. Pero, lo que sí, sé es que a pesar de tantos años se mantiene el recuerdo.
Sin embargo, puede ocurrir, como en el inicio de aquel bolero, con que nos deleitaba el Trío Los Panchos, titulado “La barca”, que dice: “la distancia es el olvido”, cesando así en nuestra memoria algo o alguna persona debido al espacio geográfico o al tiempo que los separa.
Esto último, es lo que puede haber acaecido con personajes nacidos en Orihuela, que temporalmente por tierra o mar de por medio, pudieron quedar en el olvido. Recordamos alguno de ellos, como el jurisconsulto del siglo XVIII, consejero de Castilla, Pablo de Mora y Jaraba, o con Juan Orbegozo Maseres, que recientemente hemos rescatado a través de su biografía, al que nos vamos a referir, y que prácticamente era desconocido en Orihuela, y por extensión en España, y poco investigado en profundidad en México, donde vivió desde 1817, hasta su fallecimiento.
Nació el 20 de diciembre de 1779, siendo bautizado en la parroquia de las Santas Justa y Rufina. Sus primeros años los vivió en nuestra ciudad y a los doce, se incorporó en el Ejército, como cadete, en Lorca. Fue testigo de la Guerra de la Convención o del Rosellón, entre España y Francia. Así como, de la Guerra contra el Francés, estando destinado en San Fernando, al proclamarse la Constitución de Cádiz de 1812, conocida popularmente como “La Pepa”. Cinco años después, arriba a México en los momentos en que se estaban produciendo el enfrentamiento entre las tropas realistas y los insurgentes. Al retirarse las tropas españolas de México, decide incorporarse al Ejército Trigarante capitaneado por Agustín de Iturbide, haciendo la entrada con el mismo en la Capital de México, el día 27 de septiembre de 1821. Al día siguiente, fue uno de los que firmó el Acta de Independencia de México. En esa tierra comenzará una larga trayectoria política, formando parte de su primera institución legislativa, diputado y segundo presidente del Congreso provisional constitutivo.
Tras ello formó parte de la oposición a Iturbide, dentro de una línea republicana, produciéndose a continuación su regreso a la vida militar, siendo destinado a Orizava. Al volver a la capital mexicana, comienza a desarrollar una intensa vida social, pasando a ser socio fundador del Instituto Nacional de Geografía y Estadística origen de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística.
Le fue encomendado el reconocimiento del Istmo de Tehuantepec, cuando ostentaba el grado de general del Ejercito Mexicano, y se le encomendó los trabajos de la confección del mapa general de la República.
Dentro de dicho Ejército ocupó el cargo de comandante militar de Xalapa, inspector de la Milicia Activa, vocal de la Junta Consultiva de Guerra, miembro de la Comisión para la formación del proyecto de arreglo del Ejército y jefe de la Plana Mayor del mismo.
Dentro de su participación en la vida social, lo vemos formando parte en la Sociedad Patriótica promovedora de la defensa nacional, con motivo de la Guerra entre Francia y México. Además fue uno de los fundadores de las efímeras Academias de la Lengua y Nacional de Historia. Estuvo vinculado con el Ateneo Mexicano, y con el Colegio de la Minería. Colaboró en “El Mosaico Mexicano” y en el “Registro Trimestre”. Destacó como astrónomo y formó parte, para determinar la equivalencia de la vara mexicana para la adopción del Sistema Métrico Decimal. Falleció en la Ciudad de México el 5 de diciembre de 1846.
De esta forma, hemos intentado rescatar del olvido propiciado por la distancia del tiempo y geográfica a este personaje, nacido en Orihuela y que al otro lado del Océano contribuyó en la historia de México. Fuente: Antonio Luis Galiano Pérez., Diario: INFORMACIÓN
Calendario
L | M | X | J | V | S | D |
---|---|---|---|---|---|---|
1 | 2 | 3 | ||||
4 | 5 | 6 | 7 | 8 | 9 | 10 |
11 | 12 | 13 | 14 | 15 | 16 | 17 |
18 | 19 | 20 | 21 | 22 | 23 | 24 |
25 | 26 | 27 | 28 | 29 | 30 |