POR JUAN CUÉLLAR LÁZARO, CRONISTA OFICIAL DE FUENTIDUEÑA Y FUENTEPIÑEL (SEGOVIA).
Si hay una actividad agrícola con la que siempre he tenido una especial vinculación esa es la de la vendimia, tan arraigada a nuestra comarca en las últimas décadas. Sobre todo desde que allá por 1974, con apenas 17 años, decidí aventurarme y ponerla en práctica en el Mèdoc, en la región francesa de La Gironde, perteneciente a la denominación de origen Burdeos. Me resultó tan gratificante la experiencia (dolor de riñones aparte) que decidí repetirla durante 6 campañas hasta 1981. Le Tris, Listrac, Castelnau, Moulis,… son nombres de pueblos que me vienen a la memoria, al igual que Cognac, Archiac, Segonsac, Jonzac,… en La Charente, donde también probamos suerte con notable éxito.
Los francos que conseguíamos ahorrar venían muy bien después para hacer más llevaderos los lagos cursos académicos en la universidad pucelana.
Las fotos (que aunque no son de gran calidad si me resultan muy entrañables y añorantes) son de la campaña de 1980 en Moulis, cuando ya, a mis 23 añitos, me había convertido en un experto «coupeur et porteur de hotte pour faire les vendanges». La última es de hace unos días en FUENTEPIÑEL, y como se puede comprobar apenas si se nota que han pasado más de 40 años. ¡Viva el vino!
¡Buen día!