POR ANTONIO LUIS GALIANO PÉREZ, CRONISTA OFICIAL DE ORIHUELA (ALICANTE).
Todos los años por estas fechas, cuando el Patrón Popular de la Ciudad y la Huerta de Orihuela regresa a su cita anual a la iglesia de las Patronas Santas Justa y Rufina, para ser obsequiado con su centenaria Novena, recibir la visita de miles oriolanos para besar el pie de la imagen del escultor José Sánchez Lozano y ser venerado por las Cofradías, Hermandades y Mayordomías de la Semana Santa; cuando los ensayos de las cornetas y tambores, y el ambiente se impregna de la aroma de los frutos de nuestra huerta; la ciudad despierta preparando sus gentes las vestas de nazareno y aquellas sus desfiles procesionales.
Aquel lejano año, de hace seis décadas en su Cuaresma no fue menos y la junta de la V.O.T., en octubre del año anterior acordaba pedir presupuesto a Ignacio Sánchez para restaurar el Vía Crucis que tenía enfrente del Convento de Santa Ana, y el 24 de mayo de 1962, como compensación por la utilización de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina para la Novena y la Función del Testamento a Nuestro Padre Jesús, acordó contribuir con mil pesetas para los gastos de instalación de una nueva cancela. Dicha cancela, situada en la puerta principal o de los pies del templo sustituyó a las antiguas puertas centrales del órgano de 1734 que hacía aquella función y que incomprensiblemente fueron enajenadas y vendidas a un anticuario al que, después compró el Ayuntamiento de Alicante quien la emplazó en el la Sala de Felipe II, del Castillo de Santa Bárbara, donde permanecen o deben continuar ocultas tras por un tapiz desde hace aproximadamente cuarenta años.
Por otro lado, la Junta Mayor de Cofradías y Hermandades, en mayo de 1961, para divulgar la Semana Santa aprobaba la celebración del 2ª Concurso de Carteles dotado con un premio de cinco mil pesetas, teniendo como condición que se
ejecutasen “con tres tintas y el negro”, sobre un asunto pasional, el escudo de la ciudad y la inscripción “Semana Santa Orihuela 1962”. Dicho concurso fue autorizado, el 7 de octubre de 1961 por la Dirección Provincial de Información y Turismo y se facultó al presidente Ángel García Galiano para que designara al jurado, el cual estuvo compuesto por Marcelino Abellán Mula como presidente, Antonio García-Molina Martínez como secretario y Salvador Requeni Alonso, Francisco Sanz Escanciaro, Monserrate Torres López y Antonio Vicea Martínez como vocales. Dicho Jurado, el 15 de febrero de 1962, reunido en el Salón de Sesiones del Ayuntamiento, tras analizar los trece carteles que fueron presentados, acordó conceder el premio al que llevaba por lema “La esquina del pavo”, del que resultó autor el oriolano Alfonso Ortuño Salar. Después de conocido el resultado, se celebró una exposición en el Casino Orcelitano con todos los carteles presentados.
Así mismo, dicha Junta Mayor no dejó en olvido la publicación de la revista de Semana Santa, dotándola con cinco mil pesetas. Para ello, se hicieron gestiones con Francisco Martínez Marín y Joaquín Ezcurra Alonso, teniendo como intención que la elaboraran conjuntamente. Sin embargo, fue encargada solo al primero de ellos. Para ilustrarla se abonaron seiscientas pesetas a Juan Fenoll Villegas por las fotos, siendo comisionados para controlar las fotos que debían aparecer, José Rodríguez Lozano y Luis Boné Rogel.
Lo cierto es que la revista que aparece como número veinte, de la que poseo dos ejemplares en los que no coinciden las páginas que las componen, fue publicada con una portada de José Ferrández Ortuño, con fotos además de Marcos y Loino. En uno de los ejemplares aparecen trabajos de José Guillén García, Joaquín Más Nieves y Carlos Poveda Gea; en el otro, de Camilo José Cela, dos poemas de Carlos Poveda y de F.
Andreu. Incluso hay algunas fotos en color que se encuadernaron en una, y en otra, no.
Ese año, en Semana Santa se publicó “Oleza” dirigida por Joaquín Ezcurra con la colaboración del jesuita Pedro Meseguer Irles sobre el Colegio Santo Domingo, Joaquín Más Nieves y dos trabajos de Miguel Hernández y Ramón Sijé. Así mismo, además de una reseña sobre la I Exposición Agropecuaria de la Vega Baja y entrevistas a Francisco Salas, Trino Meseguer Irles y Manuel Abadía, se incluyen varios textos de Joaquín Ezcurra.
La Cuaresma de 1962 dio más de sí, y al resto de actividades le prestaremos atención en la próxima.
FUENTE: https://www.informacion.es/vega-baja/2022/03/07/cuaresma-1962-63519523.html