En 1995, un grupo de municipios españoles deciden organizarse para difundir y proteger el legado judaico que estaba presente en su historia y en su patrimonio arquitectónico. Cáceres fue una de esas ciudades y desde entonces su presencia en la denominada Red de Juderías, ha servido para divulgar la importancia que la cultura judía ha tenido en etapas de su rico pasado, fundamentalmente durante la Edad Media. Gracias a esta red de ciudades preocupadas por el patrimonio hebreo de la vieja Sefarad, cada vez es mayor el conocimiento que tenemos sobre una minoría étnica y religiosa, que desempeñó un importante papel en el desarrollo económico de la ciudad hasta su expulsión en 1492.
CAMINOS DE SEFARAD