Hoy celebramos el Día Internacional de la Heráldica con esta entrada
La heráldica se muestra como un mecanismo de representación simbólica de valores caballerescos, pero sobre todo, está relacionada a la imagen de poder y prestigio social de nobleza, convirtiéndose en parte indispensable de las estructuras de representatividad de esta clase social. El resultado son los blasones y escudos familiares dispuestos en espacios públicos y privados.
Los reyes de armas al final de sus certificaciones, son un claro ejemplo de su uso, de cómo y dónde: “De las cuales armas podrán y deberán usar (…) haciéndolas grabar, esculpir, bordar o pintar en sus sellos, anillos, reposteros, tapices, coches, libreas, casas, capillas, sepulcros, plata labrada y demás partes que bien visto les sea”.
Para conmemorar este día, veremos el blasón en un documento de archivo parte del Fondo de Archivos Privados de la RMR – Archivo Ruiz de Arana. No es un documento propiamente de nobleza, ni genealógico, pero al que se le quiso dotar de cierta solemnidad. Materializado en el uso del pergamino como soporte de la escritura y la decoración miniada de su primera hoja y parte de ella el elemento heráldico. Nos referimos a la escritura de compraventa de la Villa de Aspe (Alicante), que otorga Juan Ruiz de Corella, Conde de Cocentaina, a favor de Gutierre de Cárdenas y Chacón, fechada el 28 de noviembre de 1497.
Con la compra de esta villa, este personaje influyente donde lo hubiese en la corte de los R.R.C.C., configuró un gran señorío en el Reino de Valencia, con las villas de Aspe, Elche y Crevillente. Por su matrimonio con Teresa Enríquez, hija del almirante de Castilla y prima hermana del Rey Fernando de Aragón, emparento con la familia Enríquez siendo estas las armas que se representan en el documento.
Escudo partido, en el primero sobre campo de oro dos lobos pasantes de azur armados, que es el escudo de linaje de los Cárdenas, con bordura de gules con ocho veneras de oro, de línea del señorío de Maqueda. El segundo mantelado, 1º y 2º de gules con un castillo de oro aclarado de azur y la manteladura de plata con un león rampante de gules, corresponden a las armas de los Enríquez, de la línea de los Duques de Medina de Rioseco. El escudo trae acolada la cruz de la orden de Santiago, timbrada con una venera de oro y una divisa en la que se lee: Santiago ruega por nosotros, ya que Gutierre de Cárdenas era comendador mayor de León de la Orden de Santiago.