
POR ADELA TARIFA, CRONISTA OFICIAL DE CARBONEROS (JAÉN)

En plena campaña electoral de las europeas nos enteramos de que han matado a tiros a la presidenta de la diputación de León. Las asesinas, madre e hija, usaron una pistola. Lo cual es raro, porque las féminas, puestas a ser malvadas, suelen recurrir a métodos más rebuscados. Les va mejor incitar a un hombre a que haga el trabajo sucio. O recurrir al veneno. Pero, al parecer, la pareja siniestra no encontró un machote a quien cargar el mochuelo. O tenían prisa. Por eso recurrieron al balazo, estilo John Wayne. Las pillaron in fraganti. Porque eran, además de malas, torpes.
Andaba yo horrorizada por los disparates que algunos escriben en las redes sociales, justificando este asesinato, cuando me vino a la cabeza el recuerdo de otras mujeres que han pasado a la historia por su implicación en crímenes. Una de ella fue la princesa de Éboli, mujer guapa, tuerta y malvada. Supo enredar con malas artes a Antonio Pérez, secretario de Felipe II, que era su alma gemela en lo del chantaje, la mentira y el tráfico de influencias. Aunque esta dama era más lista que las asesinas de León. Por eso le dio tiempo a gozar un tiempo los frutos de sus malas artes, aunque solo podía guiñar con un ojo. A la única que no engañó fue a Santa Teresa de Jesús, porque era infinitamente más inteligente que la de Éboli. Por eso se negó a fundar convento en el pueblo de la tuerta, Pastrana, por mucho que la princesa le prometiera el oro y el moro. La santa de Ávila dijo a sus monjas que mejor seguir pobres que padecer la dictadura de una mala persona. Y le dio portazo. Algo parecido hizo otra priora descalza del XVI, María de la Cruz, cuando vino a fundar en Úbeda: plantó a la rica viuda que les patrocinaba cuando vio que con sus ducados quería robarles la libertad. Ella y sus monjas dejaron la casa del barrio de Santo Tomás y se instalaron en una vivienda pobre, lindera a la mancebía. Allí pasaban frío, privaciones. Pero administraban su dignidad. Pero volvamos al tema de la tuerta de Éboli. Al final resultó que ella y el secretario se pasaron de listos y se implicaron en un asesinato de Estado. Al verse pillados, chantajearon al rey, como un tal Barcenas hace ahora con Rajoy. Pero les salió el tiro por la culata y acabaron mal sus vidas. En el exilio él, presa ella. Sin embargo la de Éboli no rompió la norma femenina de que otros mataran por ella.
De un crimen famoso en España se habló mucho a finales del siglo pasado: el de Puerto Hurraco. Allí dos hermanos se liaron a tiros en el pueblo un día para saldar viejas rencillas. Las malas lenguas contaron que quienes les encendieron la sangre fueron sus hermanas, Ángela y Luciana, que eran dos víboras. Pero dispararon ellos, y acabaron sus días en la cárcel. Son personajes de sainete en esta España nuestra que un día reza a sus santos y otro los quema. Aquí somos excesivos para todo.
Tampoco buscó una pistola para matar al violador de su hija una madre a la que acaban de meter en la cárcel. Estaba este violador disfrutando de un permiso carcelario, y tomando una cañita a la puerta de la casa de la niña violada, cuando tuvo la cara dura de dirigirse a la madre para preguntar por la víctima. No se puede disculpar la reacción de esta mujer cuando le echó gasolina al sinvergüenza, y le prendió fuego; pero nada tiene que ver esto con lo que han hecho las asesinas de León; ni con el crimen de Puerto Hurraco, o con la maldad de la de Éboli y su acolito. Porque lo de esta madre hay que pasarlo, antes de condenar. Por cierto, aquel pájaro de cuentas que fue Antonio Pérez, en su vagar por Europa escapando de la justicia española, hizo mucho daño a España con historias que alimentaron la “leyenda negra”. Y dejó bastante literatura. De las mujeres no se fiaba ni un pelo tras lo sucedido con la tuerta. En una de sus cartas escribió que “no hay leona mas fiera ni fiera mas dañina que una gentil dama. Como tal, guárdate de ellas”. O sea, que tenia claro que mansas del todo no somos cuando nos pisan un pie. Aunque hay muchos modos de matar. A veces también mata la indiferencia, arte muy femenina. Eso dice mi papelera, que piensa como mujer.
Archivos
- Elegir el mes
- marzo 2025 (210)
- febrero 2025 (350)
- enero 2025 (412)
- diciembre 2024 (392)
- noviembre 2024 (403)
- octubre 2024 (413)
- septiembre 2024 (274)
- agosto 2024 (294)
- julio 2024 (465)
- junio 2024 (457)
- mayo 2024 (481)
- abril 2024 (433)
- marzo 2024 (500)
- febrero 2024 (400)
- enero 2024 (463)
- diciembre 2023 (474)
- noviembre 2023 (463)
- octubre 2023 (461)
- septiembre 2023 (416)
- agosto 2023 (420)
- julio 2023 (410)
- junio 2023 (433)
- mayo 2023 (460)
- abril 2023 (478)
- marzo 2023 (476)
- febrero 2023 (428)
- enero 2023 (433)
- diciembre 2022 (441)
- noviembre 2022 (400)
- octubre 2022 (404)
- septiembre 2022 (421)
- agosto 2022 (413)
- julio 2022 (434)
- junio 2022 (429)
- mayo 2022 (436)
- abril 2022 (451)
- marzo 2022 (440)
- febrero 2022 (402)
- enero 2022 (402)
- diciembre 2021 (406)
- noviembre 2021 (402)
- octubre 2021 (373)
- septiembre 2021 (336)
- agosto 2021 (318)
- julio 2021 (307)
- junio 2021 (292)
- mayo 2021 (288)
- abril 2021 (264)
- marzo 2021 (274)
- febrero 2021 (266)
- enero 2021 (280)
- diciembre 2020 (300)
- noviembre 2020 (252)
- octubre 2020 (281)
- septiembre 2020 (264)
- agosto 2020 (290)
- julio 2020 (353)
- junio 2020 (375)
- mayo 2020 (428)
- abril 2020 (389)
- marzo 2020 (375)
- febrero 2020 (399)
- enero 2020 (386)
- diciembre 2019 (393)
- noviembre 2019 (472)
- octubre 2019 (392)
- septiembre 2019 (377)
- agosto 2019 (374)
- julio 2019 (451)
- junio 2019 (427)
- mayo 2019 (447)
- abril 2019 (471)
- marzo 2019 (634)
- febrero 2019 (589)
- enero 2019 (639)
- diciembre 2018 (248)
- noviembre 2018 (332)
- octubre 2018 (334)
- septiembre 2018 (200)
- agosto 2018 (157)
- julio 2018 (238)
- junio 2018 (234)
- mayo 2018 (208)
- abril 2018 (262)
- marzo 2018 (257)
- febrero 2018 (228)
- enero 2018 (333)
- diciembre 2017 (265)
- noviembre 2017 (309)
- octubre 2017 (362)
- septiembre 2017 (318)
- agosto 2017 (253)
- julio 2017 (270)
- junio 2017 (338)
- mayo 2017 (322)
- abril 2017 (301)
- marzo 2017 (355)
- febrero 2017 (378)
- enero 2017 (333)
- diciembre 2016 (439)
- noviembre 2016 (616)
- octubre 2016 (417)
- septiembre 2016 (283)
- agosto 2016 (269)
- julio 2016 (270)
- junio 2016 (390)
- mayo 2016 (420)
- abril 2016 (398)
- marzo 2016 (368)
- febrero 2016 (385)
- enero 2016 (367)
- diciembre 2015 (396)
- noviembre 2015 (328)
- octubre 2015 (364)
- septiembre 2015 (285)
- agosto 2015 (260)
- julio 2015 (281)
- junio 2015 (293)
- mayo 2015 (283)
- abril 2015 (303)
- marzo 2015 (347)
- febrero 2015 (326)
- enero 2015 (333)
- diciembre 2014 (355)
- noviembre 2014 (391)
- octubre 2014 (380)
- septiembre 2014 (226)
- agosto 2014 (177)
- julio 2014 (200)
- junio 2014 (234)
- mayo 2014 (281)
- abril 2014 (299)
- marzo 2014 (267)
- febrero 2014 (284)
- enero 2014 (244)
- diciembre 2013 (209)
- noviembre 2013 (246)
- octubre 2013 (232)
- septiembre 2013 (209)
- agosto 2013 (180)
- julio 2013 (219)
- junio 2013 (107)
- abril 2013 (1)
- enero 2013 (1)
- junio 2012 (1)
- diciembre 2011 (1)
- noviembre 2011 (4)
- marzo 2010 (2)
- febrero 2010 (1)
- marzo 2008 (105)
- febrero 2008 (67)
- enero 2008 (68)
- diciembre 2007 (48)
- noviembre 2007 (27)
- octubre 2007 (31)
- septiembre 2007 (17)
- agosto 2007 (22)
- julio 2007 (8)
- junio 2007 (5)
- mayo 2007 (22)
- abril 2007 (30)
- marzo 2007 (14)