Aclarando conceptos:

Ya en el siglo XVI a la palabra JIRA ( con J, no con G) se le asignó el significado de «banquete». A partir del siglo XIX se complemento con el adjetivo «campestre» y en la actualidad se admite esta definición :

JIRA. – Banquete o merienda campestre, entre amigos, con regocijo y bulla.

En Colunga eso del «regocijo y bulla» lo resumimos en una sola palabra : FOLIXA.

Sigamos con «nuestres Histories…»

Cuando a finales del siglo XIX ( concretamente en 1880) la colunguesa Cofradía de Nuestra Señora de Loreto estuvo a punto de desaparecer, un grupo de personas, motivadas por el párroco don Francisco Allonca, decidieron «restaurar o refundar» esa Institución, redactar nuevos estatutos y promover entusiastas actividades tanto de índole religioso como lúdico.

Y así, potenciando primordialmente la fiesta religiosa, se cuidó muy mucho el aspecto lúdico -festivo.

Y es aquí donde cobra presencia EL MARTES DE LORETO, inmediato posterior al domingo o «día grande», con excursión y JIRA a la playa de Colunga.

Era esta una fiesta pensada como contrapunto y descanso a la rutina de la vida diaria, especialmente en las gentes del campo, terminadas ya las labores del «sallu» y «randu » del maiz y la «costera de la hierba» (segar, esmerenar, encucar, embalagar, almacenar en la tenada, enfacinar…).

Y para ello, nada mejor que una romería en la playa con merienda, baile. folixa … y «lo que surja».

Las gentes iban a pie, en bicicleta y, si podían, en los autobuses «Costa Verde» con salida cada hora en la Plaza de la Iglesia. Las familias llevaban las viandas en una cesta y se proveian de bebidas en las barracas montadas en el «prau de la Cabaña». Había concursos, juegos infantiles, norias, «barquitas de columpio», barquillos, heladerías, avellaneras…).

En la actualidad la JIRA DE LORETO ha cambiado mucho. Ya no es un martes, sino un LUNES ; las gentes meriendan «el BOLLU PREÑAU y el VINO » que venden la Comision de Fiestas y algún restaurante de la playa… Sí se mantienen la romería, la verbena, la folixa, el «regocijo y la bulla».

! Ah! El maiz ni se salla ni se randa ;y la hierba se corta con segadora, se esmerena con volteadora y se empaca en horribles fardos cilíndricos envueltos en plástico.

En fin… Menos mal que aún perduran la ensaladilla rusa, las tortillas, las empanadas, los filetes de carne empanados y los pasteles artesanales.

FUENTE: https://www.facebook.com/LesHistoriesdeFidalgo