POR JUAN FRANCISCO RIVERO DOMÍNGUEZ, CRONISTA OFICIAL DE LAS BROZAS Y DE HINOJAL (CÁCERES)
Los judíos fueron expulsados de España por los Reyes Católicos en el año 1492, el mismo año del Descubrimiento de América por Cristóbal Colón, pero la herencia judía aún permanece en el país al que denominaron Sefarad y con un idioma propio, el sefardí, que aún se habla en Israel y en muchas partes del Mediterráneo, entre ellos em la ciudad griega de Tesalónica. Era tal la importancia del mundo judío en España que antes de su expulsión había unos 600 pueblos y ciudades, lo que suponía un 10 % de la población total de la nación.
Esa herencia de siglos sigue conservándose en España a través de la Red de Juderías que agrupa a 21 ciudades grandes y pequeñas, en las que hay todavía una importante vivencia del mundo hebreo. Puedo contar que hace relativamente poco tiempo el director de las sinagogas sefardíes de Jerusalén, el hispanista Abraham Haim me impuso la Medalla de las Cuatro Sinagogas, en presencia de un abarrotado salón de amigos entre ellos el egipcio Hamdi Zaki, gran profesional del turismo.
La más populosa de las juderías españolas es Barcelona, incluso hay un refrán para la ciudad extremeña de Hervás que dice: “En Hervás, judíos los más”, pero la más atractiva es Toledo, antigua capital de España, y la ciudad de las Tres Culturas: Judía, Cristiana y Musulmana, pero todos los municipios cuentan, en sus conjuntos medievales, con un patrimonio arquitectónico, histórico, medioambiental y cultural, herencia de las Comunidades judías que los habitaron. Es tanto el interés por pertenecer a esta asociación de ciudades que aun hay espetando ocho más para entrar si reúnen los requisitos necesarios.
La filosofía de esta red pública de ciudades españolas es la defensa del patrimonio histórico y legado judío promoviendo proyectos culturales, turísticos y académicos y realizando una política de intercambio de experiencias nacionales e internacionales que contribuyan al conocimiento y respeto mutuo de pueblos, culturas y tradiciones. Tiene su propia cocina y hasta el popular cocido español, que es un plato muy típico en Madrid se basa en la adafina judía.
Muchas de estas ciudades de origen judío son Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, como Ávila, Cáceres, Córdoba, Segovia y Toledo. Hay un hecho en España muy importante para el ciudadano extranjero que acredite su ascendencia judía y es que puede obtener la nacionalidad española si acredita sus raíces. Por eso hasta la fecha hay aquí hasta 45.000 personas que consiguieron ser españoles y están aposentados especialmente en Madrid, Barcelona y Málaga, así como otros lugares de la geografía española.
Para ser miembro de la Red de Juderías de España cada ayuntamiento necesita tres requisitos: Justificación histórica de su pasado hebreo, bienes inmuebles y monumentos de origen judío que puedan ser visitables y la capacidad económica para poder gestionar ese patrimonio desde el punto de vista del turismo.
FUENTE: http://pacorivero.blogspot.com/2022/08/las-ciudades-judias-de-espana.html?m=1