Pues la cosa fue que ayer viernes, día final de un septiembre otoñal, San Juan de Duz (mi pueblo natal) celebró, como inicio de sus fiestas en honor de la Virgen del Rosario, su ya tradicional ROSARIO ENTRE QUINTANES, procesión nocturna por el pueblo con alumbrado de velas, rezo del Rosario, y final en el templo parroquial.

Allí, se entregó EL ROSARIO DE HONOR 2022 a la Cofradía colunguesa de NUESTRA SEÑORA DE LORETO, fundada en el siglo XVII.

Y como yo, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (cosa que ignoran los concursantes de EL PICU) estoy obligado a «pedricar» un discursin, me dije : «Hoy, a comer algo que» furna», y que me inspire optimismo».

Qué hacer?

Pues de momento, recordando tiempos de niño, fui a «robar» FIGOS a la figar de un amigo y después NUECES a la nozal de otro. . Buena «cosecha» ; sí señor. Y es que lo robado siempre «sabe mejor» por el aquello del «placer prohibido»

Y de primer plato, qué?

! Ay, amigos!. Compré una lata de callos elaborados en NOREÑA, de los que a mi me gustan (mediano-grandes), que después, ya en casa, «alegré con guindillina» y complemente con jamonin picadin y un «aspergers me, Domine» de pimentón de La Vera.

Logicamente, no podía faltar la fiel compañía de «patatines frites de sartén».

! Ah! Y un VININ tinto , riojano de cosechero, que gritaba a voces «! Bebe, pero con mucha moderación»!

Cumplí la orden.

Bueno, bueno, bueno…

Y qué tal la homilía?.

Pues como en una ocasión dijo una señora acerca de un sermón del recordado don Eloy de Martino : «No entendí nada, pero debió ser muy buenu porque daba unes voces…»

Y el final…! Ay, qué fin de Rosario!. – Un picoteo de dulceria caseras (bizcochos, galletas, tartas… qué se yo) con un vino moscatel dulce que era una bendición.

Sí, amigos, si.

Las gentes de SAN JUAN DE DUZ » vuelan muy alto» para conseguir sus triunfos.

(Lo de «volar alto» sólo lo entendemos los «sanjuaninos»).

Verán, vean «Les afotos » de mi menú otoñal… y «enaguen».

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