POR JOSÉ MANUEL JEREZ LINDE. CRONISTA OFICIAL DE LA E.L.M. DE GUADAJIRA (BADAJOZ).
Su figura esbelta, como sacada de una xilografía japonesa, vuelve a erguirse sobre los campos ya cosechados. El graznido nos hace elevar nuestra mirada hacia el cielo para asistir a su inminente llegada. El cortejo se despliega en ángulo con su sorprendente simetría, y que nos anuncia la nueva estación.
Y como cada año seleccionan, de forma esquiva, solo determinados campos que ofrecen tubérculos y las pocas semillas que aún atesoran las tierras de labor. Siempre reacias a cualquier visitante, mantienen la distancia sin dejar de observar cualquier mínimo movimiento de aproximación.
Son, sin lugar a dudas, nuestras más elegantes visitantes que como cada año retornan buscando inviernos más suaves. La imagen fue tomada en la localidad de Obando (Badajoz) donde cada año se concentra un gran número de estas aves.
FUENTE: EL CRONISTA