POR JOSÉ LUIS ARAGÓN PANÉS, CRONISTA OFICIAL DE CHICLANA DE LA FRONTERA, (CÁDIZ)
Para conocer el origen de su nombre hemos de remontarnos al último tercio del siglo XVII (1680) y al influyente comercio de Cádiz con América; comercio que atrajo a un buen número de inmigrantes europeos a la ciudad, sobre todo genoveses y franceses. Uno de ellos, Marcos del Fierro, nacido en Saint Malo –Francia–, se afincó en la ciudad matriculándose como cargador a Indias y castellanizando su apellido Fierro por Hierro. En Cádiz hizo una gran fortuna al abrigo del tráfico americano de mercancías, invirtiendo parte de su caudal en tierras y propiedades inmobiliarias en la villa chiclanera. En 1695 casó con Juana Blasco de Aragón de cuyo matrimonio tuvo cuatro hijos: María Teresa (1895), Teresa Nicolasa (1697), Juan Bautista (1699), y Marcos.
En Chiclana adquirió un importante número de fincas urbanas y rústicas. Estas últimas las dedicó a diversas explotaciones agropecuarias: olivos, viñas, huertas, arboledas frutales y, sobre todo, pinos. En la calle que hoy lleva su nombre construyó un magnífico palacete, hoy de titularidad municipal. También poseía tierras y casas en Nueva España –México–. Él mismo cruzó el Atlántico en varias ocasiones, y allí se instalaría su hijo Juan Bautista que casaría con Isabel Ruiz de Castañeda. Falleció joven en tierras mexicanas dejando un hijo, Marcos José.
Marcos del Hierro fue el mayor hacendado de la villa e importante exportador a Nueva España de aceite, vinos y aguardientes. El 30 de mayo de 1735, el rey Felipe V, le otorgó el título de conde del Pinar por “sus servicios prestados a la Corona”. Nombre nobiliario que tomaba por poseer un gran número de aranzadas sembradas de pinos.
Bibliografía:
ARAGÓN PANÉS, J.L. (2007): “Historia y leyenda del Conde del Pinar”. Revista del 50 aniversario del C.P. Alameda. Chiclana.
-MELÉNDEZ BUTRÓN, M. y YESTE SIGÜENZA, F.J. (2006): “Calles y plazas de Chiclana de la Frontera, nomenclatura histórica desde 1700”. Fundación Vipren. Alograf, S. L. Chiclana.