ANTONIO RUIZ LÓPEZ, ES CRONISTA OFICIAL DE MONTEAGUDO DE LAS VICARÍAS ( SORIA).
El cronista oficial de Monteagudo de las Vicarías, Antonio Ruiz, presentó ayer en la Casa de Soria de Madrid, su libro ‘Monteagudo de las Vicarías. Patrimonio e Historia’, llenando el salón de actos del centro soriano de altojaloneros en la diáspora, tanto de Monteagudo de las Vicarías, como de Cetina, representada por su cronista oficial, Joaquín Ibáñez; e incluso de los pueblos sorianos de Alcubilla de las Peñas y Serón de Nágima.
Tras el también aforo completo de su presentación en Monteagudo de las Vicarías, Ruiz cosechó otro lleno ayer en la Casa de Soria de Madrid, demostrando que la iniciativa del Ayuntamiento rayano en editar este libro, sumada al conocimiento y buen hacer divulgativo de su cronista oficial, tenía demanda entre un público ávido de conocer en profundidad la rica historia de la Villa, cuna de la civilización y lugar de hechos históricos que afectan, no solo a la localidad y al Alto Jalón, sino a la historia de toda España.
Desarrollo del acto – Por José Antonio Alonso
Con el salón de actos lleno de socios y rayanos en la diáspora, en la tarde del jueves día 17 se presentó en la Casa de Soria en Madrid el libro “Monteagudo de las Vicarías: Patrimonio e historia” del autor Antonio Ruiz. El acto fue moderado por el socio de la Casa José Antonio Alonso natural de Serón de Nágima quien, tras dar la bienvenida a los asistentes e intervinientes, manifestó la vinculación, de esta Casa de Soria con Monteagudo. En este sentido hizo mención a que, en el año 2011, a la vecina de Monteagudo, ya fallecida, Felicidad Martínez le fue concedido el título de “Soriana del año”, en reconocimiento a sus méritos por el aprendizaje de temas informáticos a una edad ya muy avanzada, lo que la hizo famosa con el sobrenombre de: “la ciber-abuela de Monteagudo”.
La otra persona oriunda de Monteagudo muy vinculada a la Casa de Soria es Isabel Lope (Marita, para los paisanos). Destacó el moderador la impagable labor que viene realizando en la organización y coordinación de todo tipo de actividades lúdicas, gastronómicas y culturales.
Tras este preámbulo se proyectó un vídeo con preciosas imágenes de Monteagudo, a vista de dron, realizadas y editadas por Rafael Alonso.
A continuación, el moderador dio la palabra al alcalde de Monteagudo D. Carlos González del que destacó sus desvelos por fomentar el desarrollo del pueblo a través del turismo. Entre los logros conseguidos para Monteagudo citó los siguientes: Restauración y puesta en valor de varias dependencias del catillo palacio, ubicación en el castillo de la Galería de Arte Atelier, colocar a Monteagudo en la lista de los “Pueblos más bonitos de España”, obtención del Premio Provincial de Turismo y apoyo, desde el ayuntamiento, a emprendedores particulares como es el caso del reciente salón de té y restaurante. En su intervención, Carlos González hizo un análisis de cómo se gestó la redacción de este libro. Manifestó que echaba en falta que un pueblo con tanto arte e historia como Monteagudo, no dispusiera de un documento escrito donde se recogieran esas historias de la Historia del pueblo. Por esta razón, insinuó a Antonio Ruiz la posibilidad de la redacción de un libro. Finalmente, el libro vio la luz en el verano de este año, por lo que felicitó, una vez más, al autor por su trabajo y manifestó su satisfacción por el hecho de disponer de este volumen para poder ofrecerlo a paisanos y visitantes.
Seguidamente, tomó la palabra el coautor del prólogo profesor honorífico del Instituto Antonio Machado de Soria, José Mª. Incausa, licenciado en Filosofía y Letras (Especialidad Historia Contemporánea). Se citan textualmente algunos de los elogios dedicados al autor y su obra: “Antonio, de forma altruista y generosa, se ha enfrentado al importante esfuerzo de perpetuar el recuerdo de la cultura que vieron nuestros padres y abuelos…En el trasfondo de ese esfuerzo se encuentra el amor por su pueblo, que no es otro que el amor por su infancia, su familia, su casa, sus amigos, sus gentes, su paisaje…Es escrupuloso en su tarea, riguroso al máximo, no se conforma con la lectura de lo que otros han escrito, acude sistemáticamente a las fuentes primarias para dar a sus escritos el rigor necesario…Antonio, con esta labor ingente que ha realizado, revindica el valor de estos pueblos para que su historia y patrimonio no queden en el olvido, que en ellos pueda haber riqueza para que la vida continue y se sigan salvando esos bienes materiales e inmateriales que nuestros antepasados nos han ido transmitiendo”.
El moderador dio el turno de palaba al otro coautor del prólogo, también profesor honorífico del Instituto Antonio Machado de Soria, D. Luis Carlos Pastor, licenciado en Filosofía y Letras (Especialidad de Geografía). En su disertación y en relación con el autor y el libro, señaló que: “…subyace en este gran trabajo un trasfondo de enseñar la historia y el patrimonio de su pueblo paso a paso, como a él le gusta…Parte de este libro, quizá sin quererlo, sigue una corriente de recuperación, sin complejos, de nuestra cultura e historia con mayúsculas…En este largo trabajo de investigación, Antonio ha rebuscado en muchos archivos civiles y eclesiásticos, pero también ha tenido tiempo para interesarse por la historia oral. Ha dialogado con sus vecinos, y también ha aprovechado su tiempo vivido en Monteagudo, para dejarnos sobre el papel recuerdos e historias que ya no se perderán…En esta lectura, se transmite su sensibilidad hacia el patrimonio local, haciendo referencia a la desaparecida plaza de toros, pero también reclamando una pronta reparación y rehabilitación del viejo cementerio decimonónico con paredes de tapial; el pasado hay que cuidarlo”.
Antes de dar la palabra al autor del libro, el moderador José A. Alonso informó a los asistentes que los profesores Incausa y Pastor junto con la, también profesora, Teresa García, están llevando a cabo una muy loable iniciativa que tiene especial interés para nuestra provincia de Soria. Se trata de la creación del colectivo “Románico sin techo” centrando sus investigaciones en el románico rural para dar a conocer en los medios de comunicación y sensibilizar a los poderes públicos, acerca de la situación del patrimonio de nuestros pueblos que se encuentra en peligro de desaparición y la necesidad urgente de su conservación para legarlo a las futuras generaciones. José Antonio manifestó que precisamente conoció a los dos profesores de forma casual en su pueblo cuando pasaban tras visitar la ermita derruida de San Millán en el despoblado de Borque de Velilla de los Ajos y proceder en Serón a ver el estado de la capilla tardo – románica de la antigua parroquia de la Santa Cruz.
Finalmente tomó la palabra el autor del libro Antonio Ruiz, nacido en Monteagudo licenciado en Geografía e Historia (Especialidad: Historia Contemporánea) y Diplomado en Magisterio. Fue profesor de Geografía e Historia en el Instituto Antonio Machado donde finalizó su etapa docente. Es el cronista oficial de la Villa de Monteagudo. Autor de numeroso artículos y amplio conocedor de la historia de este pueblo. Imparte conferencias sobre el tema y enseña a visitantes al pueblo la historia, la arquitectura y el arte de: la iglesia, el castillo y la Villa y lo hace con un apasionamiento y una didáctica propia de lo que es: un buen profesor enamorado de su pueblo.
Antonio Ruiz en su intervención desgranó el contenido del libro en sendos trazos empezando por la ubicación geográfica de Monteagudo en La Raya entre Aragón y Castilla lo que ha motivado unas relaciones de buena vecindad con Pozuel, primer pueblo aragonés, situado a tiro de piedra. De hecho, ambos pueblos han compartido desde antiguo: estación, médico, ermita, río Nágima, romerías y no pocos modismos del lenguaje. A continuación, hizo referencia a acontecimientos históricos en relación con el pueblo que recoge con detalle en el libro. Citó a Alfonso VII, Alfonso VIII, Alfonso X que le concedió un fuero, Sancho IV, Fernando el Católico y Carlos I. Pasó después al capítulo donde recoge los momentos difíciles vividos como fueron: la Guerra de Sucesión, la de la Independencia y, sobre todo, la epidemia del cólera de 1885 que se cebó de forma inmisericorde con la población. Especial hincapié hizo a la audacia o, más bien, osadía de los vecinos al tomar la iniciativa de acometer la construcción del pantano que posteriormente permitió cultivos como la remolacha y los manzanos que supusieron una importante inyección económica para los agricultores. Todo lo anterior sin perder las costumbres ancestrales como los toros y la devoción a su Patrona.
El entrañable acto de presentación del libro finalizó tomando un refrigerio donde se pudieron intercambiar opiniones y suscitar comentarios entre los asistentes y los ponentes.