POR LUIS ROMERO FERNÁNDEZ, CRONISTA OFICIAL DE HINOJOSA DEL DUQUE (CÓRDOBA)
El presente trabajo es fruto la lectura del capítulo VII de La ilustre y noble villa de Hinojosa del padre Juan Ruiz (1922) que menciona el paso por la Finojosa, en 1332 del monarca castellano Alfonso XI, o el “Onceno”, en esta fecha era una humilde aldea de Córdoba que se conocía con el nombre de Finojosa del Pedroche (1316). El documento que se recogen estos datos es el más antiguo, que se tiene por ahora. Motivo que nos lleva a pensar que el origen de Hinojosa hay que situar su fecha a finales del siglo XIII o comienzos del XIV.
Hablar de Alfonso XI de Castilla (1312-1350) es tener en mente dos obras importantes del siglo XIV que se escribieron durante su reinado: Crónica de D. Alfonso
Onceno de este nombre: de los Reyes que reynaron en Castilla y en León… Por don Francisco Cerdá y Rico, 1787 y el Libro de la Montería que mando escrevir el muy alto y muy poderoso rey don Alonso de Castilla y de León… Impreso en Sevilla por Andrea Pescioni, 1582.
El Libro de la Montería es vital para conocer la toponimia hinojoseña del siglo XIV. Se cita: «La sierra del Patudo», «la Nava del Patudo», «La cabeza del Cuete», «Galapagar», «Sanct Benito» y una larga lista de topónimos hinojoseños, imposibles de citar en este trabajo.
La Crónica, atribuida a Fernán Sánchez de Valladolid, cronista del monarca castellano, es un relato cuidadoso de la vida y hechos que protagonizó. Interesa el comienzo del capítulo CXXXIV: «Estando el Rey en la ciudad de Sevilla, et aviendo firmado la tregua y la paz con los Moros, salió dende en la quaresma, et comenzó a venir su camino para Castiella, et fue tener el día de Ramos en la Finojosa logar de Córdoba: et dende fue a Villareal (Ciudad-Real), et llegó y Jueves de la Cena.»
El texto, casi telegráfico, sabe a poca. El autor de la crónica debía de haberse recreado en describir la Hinojosa de la primera mitad del siglo XIV. Pone de manifiesto que era una población con un número reducido de habitantes, de ahí el calificativo de aldea o lugar de Córdoba. Lugar de paso a Sevilla, si el viajero quería eludir pasar por Córdoba que accediendo por Santa Eufemia o Gahete (Belalcázar) se dirigía a Hinojosa, continuaba por Fuente Ovejuna a Constantina… y Sevilla. Una segunda vía era Espiel, Puerto del Calatraveño, con la opción de elegir Hinojosa o Pedroche para llegar a los dominios de la Orden de Calatrava.
Llega el momento de preguntarnos en qué templo acogió a Alfonso XI y su sequito. La respuesta puede decirnos que fue la ermita de Santa Ana o la primigenia parroquia de San Juan Bautista. Me descarto por la segunda opción. El asentamiento primitivo partió de la actual Plaza de la Catedral o Mayor. En uno de sus lados se encuentra la ermita de la Virgen de Castillo, que ha sufrido cambios a lo largo del tiempo. «En 1368 se dice que era casillo de Córdoba», que nos induce a pensar sobre la existencia de un castillo o torre, que sufrirá cambio y se convertirá en beaterio o convento de la Madre de Dios de Arriba que se fusionará en el siglo XVI con el convento de la Madre de Dios de Abajo, y dará origen al actual convento de la Purísima Concepción.
El entorno de la ermita de Santana sufrió cambios en el siglo XVII. Una nota adicional, al testo de la partida de matrimonio de Francisco Murillo y María Pineda (16-VII-1602), nos confirma que «La casa de Barona en la Plaza mayor de esta villa era de estos, quienes vendieron a la cofradía de la Señora Santa Ana un patio y un huerto, que en el día es la plazuela, que llaman de Santana.» Esta casa, no es otra que la se conoce con el nombre de sus antiguos propietarios los Vigara, que formó parte del beaterio de la Madre de Dios de Arriba.
El día que se escriba una nueva historia de la Semana Santa de Hinojosa, el capítulo I tendrá que estar dedicado al Domingo de Ramos de 1332.
FUENTE: L.R.F.