POR ÁNGEL RÍOS MARTÍNEZ, CRONISTA OFICIAL DE BLANCA
Una vez construido la nueva casa cuartel, se vio procedente su inauguración que, al estar prevista para el próximo día 25 de julio de 1927, lunes, obliga al señor Arturo Salgado Biempica, Gobernador Civil, a regresar a Murcia el domingo por la noche desde Madrid. La prensa regional se hizo eco del evento:
Blanca
Blanca progresa visiblemente en su triple aspecto político, social y económico. Después de un estancamiento suicida resurge pujante este Ayuntamiento al mágico conjuro de la voluntad recia y tenaz del actual acalde don Rafael Molina Ruiz, que ha sabido con plausible esfuerzo liberarlo de sus muchas deudas y emprender el vasto proyecto de mejoras que prometió al ocupar la presidencia del Concejo, promesa que a todos pareció una quimera irrealizable y que ha empezado a convertirse en realidad tangible. Buena prueba de lo que digo es la casa cuartel para la Guardia Civil, construido de nueva planta a costa de este Ayuntamiento; edificio magnífico hecho con todos los adelantos modernos de salubridad, higiene y comodidad, a cuyas tres cualidades principales une la elegancia de su estilo y lo bello de su forma. La situación topográfica es admirable. Enclavado en un altozano, a la margen izquierda del río, en el sitio denominado Alto Palomo, es como Atalaya que domina al pueblo o como balcón donde se contempla los miríficos paisajes de esta huerta exuberante y feraz. La bendición e inauguración de dicho edificio tuvo lugar el día 25, festividad de Santiago. Bendijo el edificio nuestro ilustre paisano, el joven doctor don Julio Ruiz Molina, canónigo del Sacro Monte, asistido por el párroco don Enrique Sánchez Guillén. Luego sirvióse espléndido lunch, donde demostró una vez más el señor alcalde de Blanca su gentileza y bizarría. En todo momento reinó franca y cordial alegría ¡y cómo no!, estaban allí las muchachas blanqueñas con su gracia encantadora y sugestiva, animándolo todo con su risa cascabelera y diáfana y la greguería jocunda de su charla sugeridora. Terminado el lunch hubo baile, que rompió el señor gobernador, terminando tan simpática fiesta como empezó: con una demostración del más franco regocijo.
Corresponsal
FUENTE: https://www.facebook.com/profile.php?id=100015585155560