POR ÁNGEL RÍOS MARTÍNEZ, CRONISTA OFICIAL DE BLANCA (MURCIA)
El 5 de junio de 1892 se terminaron las obras de La Turbina. Era alcalde Rafael Fernández Candel.
Previamente, en el Juntamento general del día 9 de enero de 1890, reunidos en las Salas Consistoriales, bajo la presidencia del señor Alcalde, D. José Antonio Fernández Candel, realizado a petición de los hacendados y representantes de D. Rafael Fernández Candel, D. José Mª Pinar Castillo, D. José Martínez Palazón y D. Fernando Ruiz Sánchez, para tratar cuanto convenga respecto si se procede o no la renovación del artefacto que en la actualidad existe para el riego o si conviene verificar éste de otra forma, ya que hay terreno que no se riegan debido a que este artefacto se halla completamente inutilizado. Por el hacendado D. Rafael Fernández Candel se dio lectura a la siguiente Proposición:
Los hacendados que suscriben, teniendo presente que con la cantidad de agua que extrae el artefacto de Noria que hoy hay establecida, que lo es de 100 litros por segundo, suficiente holgadamente para beneficiar con el riego no solo los terrenos que actualmente se benefician sino que además los que compone el pago del Campillo, verían con gusto que este Heredamiento en general acordase la instalación de un nuevo artefacto que realizare el objeto indicado, con el fin de evitar los nuevos gastos que gravitan sobre este pequeño heredamiento .
Así que, tras los trámites oportunos, donde estaba una noria fluvial, para poder ampliar la tierra de regadío, se ubicó una turbina hidráulica, por la casa Planas Flaquer y Cia., de Gerona, finalizando las obras de instalación el 5 de junio de 1892; es propiedad de la Sociedad Noria y Campillo.