POR JOSÉ ARENAS ROPERO, CRONISTA OFICIAL DE LOJA
Nació en Loja, en 1846 y el 25 de agosto de 1907, con 61 años murió en Badajoz. Militar de profesión y vocación era hijo de Francisco del Rosal Badía y de Rosario Vázquez de Mondragón y Henríquez de Luna, se casó en Montefrío con Dolores Rico y Fuensalida, tuvieron cuatro hijos llamados Francisco, Margarita, Rafael y Antonio del Rosal y Rico.
Siendo teniente de infantería fue hecho prisionero de los Mambises en 1875, liberado y participó en la Tercera Guerra Carlista, herido en la toma de Ripoll, él mismo lo cuenta en su libro “La pérdida de las Colonias o un ejército en pie de guerra”, 1879, pág.239.
Escribió varios libros sobre temas militares, inclusive un proyecto de reorganización del Ejército en 1899, ante la pérdida de las colonias de ultramar [ Cuba, Puerto Rico y Filipinas] y otro de tipo chispeante y lleno de anécdotas titulado “En la Manigua. Diario de mi cautiverio en 1875” que tuvo una segunda edición. Fue ascendido a coronel graduado antes de haber cumplido los 28 años, la reina María Cristina en una recepción en Palacio en 1902, se extrañó al verlo y le dijo: “todavía eres coronel, Rosal, nada, nada, en la primera vacante que corresponda a mi prerrogativa ascenderás”. Y, así fue, al año siguiente general de infantería. También cuenta en algunos de estos libros citados que llevaba tantas medallas que tuvo que pedir autorización para ponerse parte de ellas en el lado derecho del pecho y en los hombros, varias cruces de segunda y tercera clase distintivo rojo y blanco, cruz, placa y gran cruz de San Hermenegildo.
Otra anécdota muy chispeante fue cuando estuvo prisionero de los Mambises y cuando ya lo iban a matar y como entonces era teniente y muy dicharachero, se ganó la simpatía de sus guardianes y cuando el jefe de los rebeldes le pregunta “mi teniente” como somos amigos le voy a dejar que elija como quiere morir, le dijo Salvador Cisneros, y nuestro paisano le contestó enseguida y a voz en cuello “de viejo, quiero morir de viejo”, esto hizo que todo el grupo se echara a reír, también cuenta que mandó el indulto Carlos Manuel de Céspedes, a los pocos días.
Según he podido comprobar el General de división Antonio del Rosal y Vázquez de Mondragón, tuvo pocas visitas a su ciudad natal, fue un brillante militar y un escritor muy agudo e incisivo, pero debió ser un muy simpático y cercano a la gente, ya que era muy querido por todos.
Treinta años después de su muerte, durante la guerra civil del 1936, dos de sus hijos Francisco y Antonio del Rosal y Rico, ascendieron ambos a generales, se vieron enfrentados uno, el mayor Francisco en el lado republicano y Antonio del Rosal y Rico, General de Brigada de Artillería, nacido en Córdoba en 1891,Marques de Sales, murió en Palma de Mallorca en 1968, quien fundó y presidió hasta su muerte la Fundación “ROSAL” para asistencia a viudas y huérfanos de militares, llegó a tener más de cinco millones de ptas, para las viudas y huérfanos de la Guerra Civil.
Francisco, se casó en la Iglesia Mayor de Loja con Dª Dolores López de Vinuesa y López de Priego el 24 de junio de 1906,inscrita en el R.C. libro 20º, folio 125, su hermano era D. José López de Vinuesa y López de Priego, alcalde de Loja acompañaba a D. Alfonso XIII, en una de las visitas que hizo a Loja, la novia aprovechó la ocasión para pedirle permiso para que su novio, el teniente Francisco del Rosal y Rico, se pudiese casar, a lo que el Rey accedió. Seis hijos tuvieron el nuevo matrimonio: Dolores, Encarnación, Concepción, Antonio y dos gemelas, Africa y Margarita del Rosal y López de Vinuesa. El ejército republicano lo ascendió a General y lo puso al frente de la columna miliciana de la CNT llamada “Columna del Rosal”, pero a pesar de ser un gran militar perdió el apoyo de los jefes y en 1938 lo mandaron de gobernador militar a Tarragona. Su hijo Antonio del Rosal y López de Vinuesa, teniente de complemento en 1936, fue fusilado por los republicanos en Valencia el 29 de octubre de 1937. Su hija Concepción del Rosal y López de Vinuesa, casada con Antonio Amaya estuvieron en una checa en Madrid, siendo fusilado el marido por los republicanos.
Sus relaciones familiares se enfriaron por estas causas y también políticas y el 7 de noviembre de 1937 se casó de nuevo con Dª Consuelo García Sánchez, según consta en el libro 47 de matrimonios número 345, sección segunda del R. C. de Castellón de la Plana. Tres hijos tuvieron, de este nuevo matrimonio: Francisco, Antonio y Consuelo del Rosal García.
Terminada la guerra se exilió a Francia, la segunda guerra mundial hizo que se embarcara a Puerto Rico y luego México y por último en Managua (Nicaragua) donde murió en 1945.
Triste final de esta familia de tan rancio abolengo en nuestra ciudad, aunque ello no obsta para que todos sepamos las consecuencias y los desastres de las luchas intestinas de un pueblo cuando se dejan guiar por líderes que sólo piensan en su lucro personal.
FUENTE: EL CRONISTA