POR JOSÉ RAIMUNDO NÚÑEZ-VARELA Y LENDOIRO, CRONISTA OFICIAL DE LA CIUDAD DE BETANZOS (LA CORUÑA).
En relación con las incursiones de los piratas berberiscos en la antigua Provincia de Betanzos, ya hemos tratado de las correrías efectuadas en el siglo XVII en nuestro trabajo «Cautivos de Doniños en Argel…», publicado en las actas del XXXIII Congreso de la Real Asociación Española de Cronistas Oficiales, celebrado en Toledo en 2007 (consultable en esta web), y ataques que fueron a menos en el siguiente siglo hasta desaparecer tras la Guerra de la Independencia, en razón a la determinante actuación de los gobiernos europeos para controlar a los bárbaros agresores.
Por lo general los navíos de moros o de corsarios musulmanes, procedentes generalmente del Norte de África, se dedicaban al robo en las embarcaciones y apresamiento de la tripulación, además de atacar a las poblaciones costeras, en las que apresaban a los naturales para llevárselos en cautiverio y posteriormente exigir rescate por su liberación y regreso al país de origen.
En el año 1729 ejercía el cargo de Gobernador y Capitán General del Reino de Galicia don Leopoldo Adriano José de Rifflart y Vooght, Conde de Itre, quien se dirige mediante oficio a la » Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Vetanzos «, para advertir sobre la presencia y actuaciones de los moros en la Costa del Reino de Galicia, del tenor siguiente:
» Aviendo del Puerto de Camelle avisado Dn. Francº. Caamaño de que el dia 16 del presente al amanecer quatro fragatas de moros echaron en tierra sus lanchas en aquel Puerto y en otro lugar Cercano donde Cautibaron Cinco personas (dejando uno muerto) y dos niños saqueando todo lo que pudieron alcanzar, y de Malpica por carta ded 17. rrefiere que se ben Cruzando aquella Costa asta 30 u 20 navios de que se puede rrecelar yntenten alguna obstilidad en el país por lo que se hace preciso para enbarazar qual quier desenbarco practique VS. las mas bivas deligencias para que toda la Gente alistada en la parte de esa Costa esté sobre las Armas y que al primer llamamiento Concurra, adonde Ubiere la necesidad dandome los mas Pronptos aVissos de todo lo que ôbcurriere.
Dios Guarde a V.S. muchos años. Coruña 18 de Junio de 1729.
[Firmado]. Conde de Ytre.
[A pie de documento]. M.N. y M.L. Ciudad de Vetanzos «. (Archivo Municipal de Betanzos. Caja 4, sin catalogar).
El escrito antecedente es enviado al Corregimiento de Betanzos tres días después, e inmediatamente la Justicia y Regimiento convoca Ayuntamiento para el 22 de Junio de 1729, entre los que figura nuestro antepasado don Manuel Antonio Varela Bermúdez, Regidor Perpetuo de la Ciudad de Betanzos por Su Majestad, en cuya Junta se hace constar en acta, entre otros, el acuerdo siguiente:
» Ayuntamiento de 22 de junio de 1729
En la ciud de vetºs y dentro de sus Rs (Reales) Casas de Consistorio, A vte y dos dias del mes de junio año de Mill Setezºs y vte y nueBe aviendose juntado segn costunbre Los Sres Justiciª y rreximiº esPecialmte Los SSres D Blas M[arti]ns Villozas, Alferes Maºr Regºr mas Antiguo, que administra Justiª en virtud de Rl despacho de Su Magd. y Sres del rreal aqº (Acuerdo), D. Manoel Muñiz de Andrade, D. Jaztº (Jacinto) Brandaris y andrad y D. Manoel Antonio Vª (Varela) Bermúdez, Cavalleros Rexidores de dha ciud.
En este Ayuntamiº se a visto Una Carta del Ssr Conde de Ytres Con mendante Militar en este Rnº. su fecha en La cor[uñ]a a vte y uno del presente en que Participa a esta ciud, que conveniendo thomar Providª (Providencia), Por las ostilidades que acen los arjelinos en las Costas deste Rnº (Reino) se avia encargado al Thenie (Teniente) Coronel D. Roque gomes, de su arreglamento, en consequencia del nonBramiº que anteriormente thenia este oficial del Sr Marqs de Caylus, y Para que sea Con Pleno Conocimtº de la pte armada aque ay, en esta Proviª (Provincia) Se sirva la Administrar Las notiªs (noticias) correspondies (correspondientes) de tal encargo, con una Relacion de los naturales, que deven ocurrir a Los fachos garitas y cintinelas y en las urjencias que se ofrescan con distincion de las frªs (feligresías) que en Tierra, cada caudillato. Y se acordo qe dha Carta se Juntte a este libro y que se responda a dho Señor Conde de Ytres, que los Puertos y Costa desta Provincia con sus fachos Garitas y cintinelas, tienen Sargentos Mayores y ofiziales Militares señalados Con pattenttes De Su Magd (Majestad) y hordenes del Sºr Capitan general y los Partidos Correspondienttes a este Cuidado y a concurrir en casso de Rebato. Se allan Asignados a satisfazºn delo practicado hasta Aqui. Y que esto mismo conttoda expresºn hizo presste (presente) la ciud a dho Sºr Marques de Cailus, haviendo tambien la diputtaºn destte Rnº en ocho de Agosto de mill Settezºs y vte y seis ynformado a S.M. lo conducentte, y que los Naturales deste Reino estavan ynermes, solicitando de la Real Venignidad se les diesen las Armas y demas Muniznes (municiones) necesarias de quenta dela Rl (Real) hacienda, delo que todavia no ubo resoluzºn con que parece que por aora, no puede la Ciud ynobar y solo Reyterar si fuera Menester las mas extrechas providencias, que acaba de expedir alas Justicias, en virtud delo qe dho Sºr Conde de Ytres la previno en dha Carta de diez y ocho del Corriente; Y asi lo Acordaron… [Firmado]. D. Blas Martinez Villoças,D.Manuel Muñiz de Andrade, D. Jacinto Brandariz y Andrade, D.Manuel Antonio Varela Bermúdez.[Rúbricas]. Ante mi.[Firmado].Francisco Caneiro de Arriola.[Rúbrica].«. (Ibídem).
Un escrito semejante lo firma el Conde de Ytre en Betanzos con destino a la Ciudad de La Coruña, cuyo Ayuntamiento lo eleva a la Junta del Corregimiento para dar cuenta de las medidas a adoptar en caso necesario, el 11 de agosto del mismo año.
Tan inermes como nos encontramos en la actualidad ante la avalancha de criminalidad y la evidente inoperancia por parte del Estado en combatirla, contribuyendo a su impunidad como un mero espectador y negando el acceso a la justicia de todos los ciudadanos. Sin lugar a dudas nos vemos abocados a padecer otros tipos de cautiverios en pleno siglo XXI, y no hablemos del respeto a las antiguas costumbres y tradiciones que brillan por su ausencia, como sucede en Betanzos.