LA SOLEDAD Y LAS ANGUSTIAS EN SUECA
POR RICARDO GUERRA SANCHO, CRONISTA OFICIAL DE ARÉVALO (ÁVILA).
El décimo congreso de cofradías y hermandades de Nuestra Señora de las Angustias, se ha celebrado el fin de semana en la ciudad valenciana de Sueca, la tierra del arroz y las naranjas, que por estas fechas ya tiene recolectado esta gramínea del agua. Una gran llanura planicie cuadriculada en sus rastrojos, algunos aún encharcados y todos esperando la preparación para la próxima campaña. Allí nos reunimos un buen número de personas todas vinculadas por la devoción a la Virgen n su advocación tan popular y extendida, de Las Angustias. En estas tierras levantinas predomina la advocación de Piedad, que viene a ser lo mismo, son variantes iconográficas, historias y costumbres.
Muchos, la mayoría, ya somos conocidos de anteriores encuentros que nos gusta compartir experiencias y creencias marianas. Alguna cofradía o hermandad nueva, otras que no han podido acudir… pero es la super hermandad cofrade de esta advocación Dolorosa que está extendida por todas partes. Cofradías nuevas y otras viejas cargadas de historia y de siglos.
Aún recuerdo con cariño el primer encuentro, en Úbeda, donde celebraban el emblemático primer centenario de su creación y fue el germen de esta actividad de convivencia y de compartir experiencias y costumbres. Después vino Murcia, donde tomó carta de naturaleza, el año del III Centenario del nacimiento de Salcillo, el gran escultor murciano y además autor de Las Angustias de Murcia. El tercero de Cuenca, con aquellas empinadas cuestas en procesiones bellísimas y el gran libro editado con muchas cofradías e imágenes. Siguió Estepa, el cuarto, con olores a Navidad, la tierra de los polvorones y mantecados que con su aroma inundó todos los acos. El quinto, en la imperial Toledo, historia por todas partes. Y continuamos el sexto en Zamora, la Semana Santa castellana en estado puro. Aquello ya había tomado carta de naturaleza y es una meta de muchos, aunque podían ser más por lo extendido de esta advocación. Y llegó el VII en Granada, patrona de enorme grandeza y nuestras vinculaciones históricas y afectivas en torno a Isabel la Católica, la gran difusora de esta devoción, y su magna procesión desde la catedral a la basílica, inolvidable. Lo mismo que Valladolid, el VIII, la otra gran cofradía histórica, ciudad con cofradías de gran profundidad y tradición, y Las Angustias, con su imagen de Juni extraordinaria. Y llegó el IX, en Jerez de la Frontera, de nuevo al sur, otro estilo, ciudad de mucha tradición cofrade y acogida magnifica, aquí hubo dos procesiones…
Con esta de Sueca, el décimo congreso, se ha puesto de manifiesto que el tamaño no importa, una cofradía humilde y relativamente moderna, pero con un empuje inusitado y lleno de ilusión y ganas de agradar. Enhorabuena hermanos cofrades por vuestro logro y por las atenciones recibidas, han sido unos momentos inolvidables.
En la asamblea se mostró un audiovisual de Ayamonte, la puerta de España junto al Guadiana y Portugal, otra ciudad del sur con sus peculiaridades que ya ha despertado el interés de todos. Cada dos años, es de frecuencia bienal, años impares, aunque la pandemia nos hizo desear el encuentro de Jerez y se alteró el orden, que ya ha sido recuperado.
Dos aspectos destacaría yo de estos encuentros. Uno, la convivencia y confraternización de cofradías y cofrades, que es bueno compartir vivencias, formas de vida y organización cofrade, de mirarnos en quienes tienes gran experiencia y número de miembros y junto a los humildes.
Y otro, el aspecto más religioso, el verdadero motivo de estas celebraciones marianas, el cómo profundizar en nuestras vidas con Nuestra Señora como compañía, las creencias en la Virgen Nuestra Señora, en cómo ve y vive cada lugar esa religiosidad popular.
Desde el primer momento, el ambiente de cofradía me sorprendió por sus connotaciones que tiene tantas variantes como lugares, con un mismo origen.
Ya pude profundizar algo en estas cuestiones cuando estaba escribiendo mi libro de la Virgen de las Angustias de Arévalo, esa devoción ancestral y cómo de un mismo relato, poco a poco, la piedad popular ha ido creando tantas variaciones sobre una misma melodía devocional.
La Piedad en Sueca y en Levante en general, Las Angustias en tantos sitios… un maravilloso motivo para el encuentro de tantas gentes de tantos lugares…
