POR GUILLERMO FERNÁNDEZ RABADÁN, CRONISTA OFICIAL DE VILLAS DE LA VENTOSA (CUENCA)
Aunque yo no lo viví, debió ser una enseñanza en un ambiente muy familiar, donde además de conocerse los niños, también se conocían los padres y la relación entre todos era muy cercana. Alejados de la tecnología que hoy lo domina casi todo, en esa época los niños jugaban en muchas ocasiones al aire libre con las canicas, la comba, etc. Recuerdo que en casa de mi abuela se contaba cómo en la época fría los niños iban a la escuela con un “ceporro” para contribuir al calor en el aula.
Este tipo de enseñanza rural era en ocasiones impartido por maestros del mismo municipio, como en 1969, donde la maestra y directora de la Agrupación Escolar Mixta era doña María del Carmen Ladrón de Guevara Sevilla. El citado año 1969 finalizaba el curso a finales de junio y los niños tenían que enfrentarse a las pruebas de conocimiento. En concreto, el 20 de junio se realizaron los exámenes en las escuelas del pueblo, gran edificio situado en el recinto de la antigua fortaleza de los señores y condes de La Ventosa.
Los niños de nueve años debían realizar las pruebas de promoción en unos cuestionarios de seis hojas del Centro de Documentación y Orientación Didáctica de Enseñanza Primaria y estaban divididas en lectura (oral y comprensiva), escritura (caligrafía, dictado y redacción), matemáticas (numeración, operaciones, sistema métrico decimal y problemas), conocimientos (lengua y religión), unidades didácticas, educación cívica y social (niños), formación político-social y hogar (niñas), expresión artística (dibujo, música, canto, manualidades), habituación (hábitos operativos, sociales y mentales) y educación física.
Hay que destacar que en estas pruebas el entorno y el ambiente rural estaban presenten en muchas partes del examen, ya que en varias preguntas aparecían animales como caballos, vacas, gallinas, etc. Ejemplo de ello es lo siguiente:
– Problema: En un corral hay 50 gallinas. Una noche entra la zorra y se come 17. Las gallinas que quedan las venden a 65 pesetas cada una. ¿Cuántas pesetas les dieron?
– Manualizaciones: Recortar una vaca (de una plantilla). Hacer un adobe. Forrar un libro.
– Hábitos mentales: Semejanzas y diferencias de una oveja y una cabra.
– Escribe el nombre de tres frutos que se den en tu pueblo.
– Cuál de estos actos puede ocasionar un accidente: levantarse tarde o dormir con el brasero encendido.