POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Hace unos veinte años – ¡ qué deprisa corre el tiempo! – escribí para la leonesa EDITORIAL EVEREST S.A. , dentro de su colección «Cocina y Aprende» , el libro CON SABOR A SANTIDAD en el que recojo y explico recetas e historias de platos muy diversos que responden a títulos » de índole religioso o celestial».
Así, por ejemplo , detallo la historia de las «yemas de Santa Teresa o de San Leandro» , la invención del «tocinillo del cielo» , el origen de «los deditos del Niño Jesús » , las cualidades de las galletas de «¡Ay, Jesús , que me ahogo!»…
Y por supuesto , no puede faltar el «dulce de cabello de ángel «, que nadie supo aclarar a que tipo y jerarquía de ángel corresponde aunque su cuna sea la pulpa de un tipo de calabaza denominada Cucurbita ficifolia.
¿Saben ustedes?
La Angelologia cristiana distingue 9 tipos de ángeles que agrupa en tres jerarquías de mayor a menor dignidad :
1.- Serafines, Querubines y Tronos
2.- Dominaciones , Virtudes y Potestades
3.- Principados , Arcángeles y Ángeles.
Los Serafines son los de mayor jerarquía y los más cercanos a la Divinidad.
Bueno , bueno , bueno…
Ayer por la tarde , en retorno de Gijon a Colunga , hice «parada y fonda» en Villaviciosa , concretamente en el CAFE DE VICENTE-PASTELERIA. Hacia algún tiempo que no visitaba ese establecimiento , que siempre me demostró amistad sincera… y alta calidad de servicio.
Y allí, en abanico de variedades dulceras , compruebo que JACOBA («COBA»), esposa de Vicente y excelente repostera , hace gala de asturiania con sus hojaldres de MANZANA y de CABELLO DE ANGEL para , así, ensamblar en dos dulces la leyenda del Paraiso : la manzana tentadora y el ángel castigador.
No queda ahí la cosa. Con esos hojaldres» tartaleta» ,no faltan florentinas («chocolatinas » análogas a las ovetenses moscovitas) y «maliayinos» de nuez y avellana con parecido a los feos de Benavente o a los Carajitos de Salas.
Yo, a mis años y a mis kilos., ya dejé de ser goloso y , claro , me resulta fácil vencer el » petite dulcero». Pero , ¡Ay, Dios mio! , a la vista de estas maravillas de COBA tuve que «pecar» (no picar) un poco.
Un pecadin venial que me tolero mi Angel de la Guarda que , «¡probin!» , ye el último de la 3° Jerarquía.
NOTA. – FOTOS que resumen e ilustran todo lo comentado.