ENTRE LOS PRESENTES ESTUVO LA CRONISTA DE OVIEDO, CARMEN RUIZ-TILVE
Hay una cosa que el cofrade mayor Antonio Bascarán deja muy claro y no se cansa de repetir: «El espíritu fundacional de la Cofradía Amigos de los Quesos del Principado de Asturias es el de la defensa de los quesos y las queserías pero, sobre todo, de las familias que trabajan para hacer estos magníficos quesos asturianos». El producto es importante y las personas que lo elaboran «aún más».
Una puntualización que Bascarán subrayó ayer en la reinauguración de la sede de la cofradía, en el número 4 de la calle Palacio Valdés, tras una obra de ampliación. Con 31 años de trayectoria, prácticamente ninguno de los 44 cofrades faltó a la cita, en la que las queserías estuvieron representadas por «Esther y su hijo José, de La Peral y Peranzola; la familia Inés Granda, de Queso de Pría; Pascual Cabraño, de Afuega’l Pitu del Rey Silo; y Luisa con Gamoneu D’Onao», tal y como enumeró el cofrade mayor. Previamente, el canónigo de la Catedral José Franco Baizán, convertido ya «en medio cofrade», bendijo con aguas del Jordán la remodelada sede, lugar de jornadas gastronómicas con el queso siempre como protagonista.
El alcalde, Agustín Iglesias Caunedo, se dirigió a los presentes y fue directo: «El queso es una riqueza patrimonial única en Asturias». Deseó, por tanto, muchos éxitos a la cofradía que lo protege, de la que destacó «su afán cultural».
El cofrade mayor, Antonio Bascarán, a quien ayer le invadía un sentimiento «de entusiasmo», rememoró aquel 3 de marzo de 1984 en el que nació la cofradía; también tuvo unas sentidas palabras de recuerdo al cofrade recientemente fallecido Antonio Barthe, que convirtió en un canto alegre a la amistad. Los aplausos, unánimes. Entre los presentes, la cronista de Oviedo, Carmen Ruiz-Tilve; el presidente de la Sociedad Filarmónica, Jaime Álvarez-Buylla; el presidente del Centro Asturiano, Alfredo Canteli; el director del Ridea, Ramón Rodríguez; el pintor Manolo Linares, o el presidente de la Academia de Gastronomía Asturiana, Eduardo Méndez Riestra.
Fuente: http://www.elcomercio.es/ – P. Alvear