FELIPE V DE ESPAÑA (1700-1724) EL PUERTO DE LOSILLA-CAMINO DE LA SEDA.

POR GOVERT WESTERVELD, CRONISTA OFICIAL DE BLANCA (MURCIA)

Varios vecinos de Blanca estaban implicados en 1721 en el cultivo de arroz en la huerta de la acequia de Archena. Estos hechos demuestran claramente la persistencia del cultivo de arroz en la región, cuya producción era característica de zonas como Ceutí, Archena, Villanueva del Río Segura y Ulea, es decir, la parte baja del Valle de Ricote. A pesar de la importancia de este cultivo, durante el siglo XVIII estuvo prohibido plantar arroz en los márgenes del Segura, ya que se consideraba que el cultivo corrompía el caudal del río y perjudicaba la salud de los habitantes de la ciudad de Murcia.

Ante esta prohibición, la reacción de las élites locales no se hizo esperar. Entre los miembros del concejo de la villa de Blanca estaba Francisco Molina Buendía, quien apoderó a don Juan de Llamas, vecino de Ricote, para que junto con otros defendiera el pleito para mantener el cultivo del arroz en Archena. Este pleito se originó debido a la prohibición impuesta por el Consejo de Órdenes en 1720, que buscaba eliminar el cultivo de arroz en esta zona.
Además, Blanca también jugó un papel importante en el cultivo y comercio de la seda. En esta localidad se cultivaban moreras, árboles de los que se alimentan los gusanos de seda, y se criaban estos gusanos, lo que permitía a Blanca participar activamente en el tráfico de seda, especialmente en relación con Murcia y Pastrana. Este comercio era una parte vital de la economía local y regional.
El camino más relevante para el comercio de la seda era el que unía Toledo con Murcia y Cartagena, conocido como el camino de la seda, que tenía una longitud de 59 leguas. Las localidades por las que pasaba este camino, comenzando desde Murcia, incluían Espinardo, Molina de Segura, Puerto de la Losilla, Cieza, Puerto de la Mala Mujer, Tobarra, Venta Nueva, Chinchilla, Albacete, La Gineta, La Roda, Minaya, Provencio, Las Mesas, Manjavacas, Toboso, Miguel Esteban, El Molinillo, Villacañas, Tembleque, Almonacid y Nambroca.

En resumen, la historia de Blanca en el siglo XVIII refleja tanto los desafíos legales y sanitarios relacionados con el cultivo de arroz como su participación en el floreciente comercio de la seda, conectando la región con importantes rutas comerciales que enlazaban diversas localidades de España.

FUENTE: https://www.facebook.com/profile.php?id=100015585155560

Sin Comentarios.

Responder

Mensaje