POR ANTONIO BOTÍAS SAUS, CRONISTA OFICIAL DE MURCIA.
Hubo un murciano avispado que fundó una funeraria llamada a convertirse en otra contradicción murciana.
Murcia es una ciudad de sorprendentes contradicciones. Pongo por caso que el histórico edificio de los Nueve Pisos solo tiene ocho. O que celebramos la Resurrección en la mañana ‘morá’ del Viernes Santo, pues sabemos cómo acaba la historia, repartiendo caramelos, monas y huevos duros, …