LA ESCUETA PLACA EN LA ESTATUA DEL CRONISTA OFICIAL LLEVA A LOS TURISTAS A CONFUNDIR AL HISTORIADOR CON «UN ANTIGUO ALCALDE» E INCLUSO CON «UN PERSONAJE DEL ROMANCERO»

«¿Habrá sido algún alcalde de la ciudad?», «Tiene pinta de tener algo que ver con la Semana Santa, que aquí es muy famosa», «¡Será algún personaje histórico del Romancero, seguro!». La escueta placa explicativa que acompaña la estatua del CRONISTA OFICIAL DE LA CIUDAD, HERMINIO RAMOS, lleva a los turistas que atraviesan la plaza de San Ildefonso a concluir mil y una interpretaciones sobre la figura del profesor. Sin embargo, raro es el viajero que discurre por las calles del casco histórico que no haga una parada ante la figura de DON HERMINIO pese a desconocer el porqué de su ubicación en pleno centro del eje histórico. «Al maestro HERMINIO RAMOS PÉREZ. 3 de octubre de 2009» es la única inscripción que figura en la placa que yace sobre el suelo, a los pies de la escultura, lo que tampoco saca de dudas a los turistas.

A pleno sol mañanero, un matrimonio portugués toma una fotografía junto al alter ego de DON HERMINIO. «No sabemos quién es, pero llama la atención su aspecto y tiene cara de buena persona», comentan. Lo mismo opina un grupo de jóvenes gallegos que ayer se aproximaba en dirección de la Catedral para conocer el «tan afamado románico zamorano», decían los jóvenes estudiantes

El propio HERMINIO RAMOS es consciente de las muchas fotografías que habrán ido a parar a las colecciones de imágenes de turistas de todo el mundo. Tanto es así que «cuando veo que hay algún grupo con guía», el entrañable personaje no tiene ningún reparo en pararse ante ellos y decirles: «Aquí estoy yo, el de verdad, el original», bromea. Calcula que desde que la estatua está instalada en la ciudad, «me habré hecho más de cien fotos con turistas»,.

En sus habituales «pendoneos», tal y como él llama a los paseos matutinos y vespertinos que realiza a diario, es frecuente ver al historiador con su gesto amable respondiendo a todos los saludos de viandantes que, en muchos casos, no conoce ni identifica, pero a los que devuelve los «buenos días» con una sonrisa en la cara. Por la tarde, después de la siesta, cuando acude junto a su inseparable esposa María a misa de siete a San Ildefonso, repite su sesión fotográfica de por la mañana. «Yo sólo puedo estar agradecido», dice, con humildad.

Durante los últimos días y, por tercera vez desde su instalación hace ya cuatro años, la escultura de HERMINIO RAMOS luce con sus tradicionales gafas de pasta rotas, repuestas en más de una ocasión.

Tal vez pocos o ninguno de los turistas que plasmará en sus álbumes de fotos a HERMINIO RAMOS sepa que el personaje de aquella figura de bronce en aquella rúa zamorana fue el impulsor hace más de cuatro décadas de la tradicional Feria de la Cerámica zamorana, concejal de Cultura entre 1971 y 1979, y delegado provincial de Cultura entre 1978 y 1981. También desconocerán que el modelo de carne y hueso de esa fiel reproducción ha escrito cientos de artículos periodísticos y ha impartido conferencias, charlas y mesas redondas. Un legado bien conocido por los vecinos de la ciudad que ven en su querido HERMINIO RAMOS a uno de los personajes más entrañables de la capital de Romancero. Y por muchos años.

Fuente: http://www.laopiniondezamora.es/ – Tania Sutil