POR HERMINIO RAMOS, CRONISTA OFICIAL DE ZAMORA
La de Gracia es una de esas Siete Hermanas que forman la hermosa familia que los pueblos de ambos lados de la Raya crearon para fortalecer su fe y su unión, esa unión que desde ambos lados siguen esperando. La ermita de Gracia, levantada en lo más alto de ese Sayago eterno e inmortal, ha sido y sigue siendo ese centro mítico y espiritual desde hace siglos y junto a ella, todos los días 9 de cada mes, la fuerza económica de ese Sayago ganadero desde lo más hondo de sus valores celebraba su feria mensual y allí se fundían en armonioso conjunto ferial, sueños y esperanzas de ese futuro de cada día. Y nada digamos cuando llegaba el 9 de mayo y por todo ese Sayago se movían impacientes las recuas y con ellas se oía el dicho de «Tú vas a Gracia, yo voy al Cristo, tu vas a la madre, yo voy al hijo», toda una filosofía y un pensamiento lleno de firmeza y esperanza como es fácil entender.
La soledad no debe ser fórmula que marque o señale como continuidad el abandono de ninguna manera y menos con esos símbolos de nuestra historia, cuando con ella van íntimamente unidos como esencia fundamental los valores espirituales, hoy la ermita de Gracia es la única de esas Siete Hermanas que llora su abandono, las últimas noticias nos hablan del mal estado de su cubierta y un estado general de aspecto que está pidiendo a gritos ciertas atenciones.
Creo con toda sencillez y sinceridad que las autoridades competentes no van a permitir esa situación más tiempo y dado como se ha dado la voz de alarma se pondrán en marcha los departamentos correspondientes para poner remediar cuanto antes tal situación, que por otra parte saca a la luz estas lamentables situaciones que nos definen. No podemos permitir que toda la historia acumulada a lo largo de siglos se lo lleve la desidia o el olvido.
Fuente: http://www.laopiniondezamora.es/