«PAISAJE NATURAL INTACTO QUE FAVORECE UNA EXCEPCIONAL RIQUEZA FAUNÍSTICA ENTRE LAS QUE SE ENCUENTRAN ALGUNAS DE LAS ESPECIES MÁS AMENAZADAS DE LA FAUNA PENINSULAR», ARGUMENTA EL CRONISTA OFICIAL DE VILLANUEVA DE LOS INFANTES, CLEMENTE PLAZA PLAZA
Campo de Montiel quiere ser Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y en ese objetivo están trabajando los 23 municipios que conforman la comarca. Así, tras iniciar los trámites el pasado mes de septiembre mediante el registro de la solicitud y el proyecto correspondiente en la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, ahora el próximo reto es elevar la propuesta al Ministerio de Educación y Cultura. Y para ello, se ha dado ya un primer paso que pasará a los anales de la historia por haber conseguido la unanimidad de las 23 localidades, a través de sus corporaciones, que conforman la comarca en apoyo a la propuesta de que Campo de Montiel sea Patrimonio de la Humanidad. De esta forma, tras la adhesión de los últimos municipios como Montiel, Torre de Juan Abad o Santa Cruz de los Cáñamos, se podrá acompañar al proyecto las actas de los 23 municipios que conforman Campo de Montiel.
Clemente Plaza es el cronista oficial de Villanueva de los Infantes, presidente de la Plataforma Campo de Montiel-Origen Histórico del Quijote y uno de los artífices de la idea de situar la comarca en la lista de la Unesco. En declaraciones a La Tribuna hace hincapié en los requisitos que reúne la comarca para obtener una declaración por la que se lleva luchando desde el año 2012, cuatro años en los que se ha estado elaborando un «proyecto mejor articulado, más idóneo y más preciso en la búsqueda del máximo consenso de los valores y argumentos que pudieran presentarse en cumplimiento de los requisitos establecidos por la convocatoria de la Unesco». En este sentido, explica que pocas comarcas de España, y posiblemente del mundo, agrupan atractivos más que suficientes para ser reconocidos por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. Entre ellos, argumenta, su estrecha vinculación con la obra del Quijote y su situación geográfica «al ser cruce de seis caminos históricos formando un gran área cultural a lo largo de las distintas épocas de Jorge Manrique, Quevedo, Lope de Vega, Cervantes o personas ilustres como Santo Tomás de Villanueva».
Pero a este paisaje cultural hay que sumar, señala Plaza, el patrimonio arqueológico y arquitectónico de localidades de la comarca como Villanueva de los Infantes, declarado Conjunto Histórico-Artístico, o «impresionantes» plazas como la de San Carlos del Valle o La Solana. Sin olvidar tampoco sus atractivos naturales de una comarca que cuenta con un parque nacional: Las Lagunas de Ruidera. «Paisaje natural intacto que favorece una excepcional riqueza faunística entre las que se encuentran algunas de las especies más amenazadas de la fauna peninsular», argumenta el presidente de la Plataforma Campo de Montiel-Origen Histórico del Quijote y cronista oficial de Villanueva de los Infantes, Clemente Plaza Plaza.
En total, 23 municipios con «claros nexos comunes entre todos ellos» que se han unido por alcanzar un mismo objetivo al que se espera que se sume también el sector empresarial y los vecinos de la comarca. Una nueva fase de andadura para el «futuro más inmediato», ya que «se quiere contar con el respaldo del tejido social, cultural, económico e institucional de todo el Campo de Montiel».
El proyecto se encuentra ahora en remitir toda la información al Comité Nacional Español del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios Histórico-Artísticos (Icomos-España) de la que forman parte diferentes expertos de arte, patrimonio, cultura,… además de elevar también una copia a la subdirección de Patrimonio de la secretaría de Estado de Cultura. Para ello, la comarca «no se ha marcado plazos» al considerar, explica, que se trata de «una carrera de fondo» que comenzó hace ahora cuatro años, por lo que «somos conscientes del trabajo y la dedicación que conlleva conseguir esta declaración» que de alcanzarla, explica, supondrá importantes ventajas a una comarca que «cuenta con un alto porcentaje de despoblación y que tiende al envejecimiento por la falta de recursos económicos». Así, uno de los beneficios que conllevaría ser Patrimonio de la Humanidad por la Unesco para la comarca «sería preservar un bien e impedir un deterioro de ese patrimonio y paisaje».
Fuente: http://www.latribunadeciudadreal.es/ – Ana Pobes