LA SOLEDAD DE LOS ABUELOS
POR APULEYO SOTO, CRONISTA OFICIAL DE BRAOJOS DE LA SIERRA Y LA ACEBEDA (MADRID)
Niños de oro de sol y de luna pascual, abejas de arrebol con alas de cristal: Vuestra risa de grana no paro de esperar. ¿Vendréis hoy o mañana o pasado quizás?
Por la Casita Alta me veréis suspirar con un vaso de malta en la mano anular. ¡Ay qué frío, qué frío y cuánta soledad en el campo sombrío de la tercera edad!
Venid, niños, venid y calmad la ansiedad de este pobre aprendiz que cuenta su verdad.
El río de mi vida corriendo va a la mar de forma desmedida. Después: dormir, soñar.