POR ÁNGEL DEL RIO, CRONISTA OFICIAL DE GETAFE Y MADRID

Madrid es la capital de España y también la capital de la Champion Ligue. Como hace dos años, dos equipos madrileños, Real y Atlético, volverán a disputar la final del torneo futbolístico por clubes más importante de Europa. Entonces se fueron a Lisboa para dirimir el título, ahora viajarán hasta Milán para una nueva disputa de la corona continental. Es un orgullo y un honor para la villa del oso, el madroño y el balón, que sus dos primeros equipos copen el podio europeo.

El Real, declarado el mejor equipo de fútbol del siglo XX, se enfrenta a la posibilidad de conquistar su undécima Copa de Europa; el reto del Atlético, conseguir su primera. Ambos equipos llegan en igualdad de condiciones. Los blancos, cuajados de estrellas; los rojiblancos, cuajados de gladiadores. Son dos formas distintas de entender este deporte. Por un lado, la creatividad, y a veces, la fantasía; por otro, el esfuerzo solidario, la pelea y la fe. Una delantera letal, la blanca; una defensa única en Europa por su eficacia, la colchonera. Dos maneras distintas de jugar al futbol y ambas, ganadoras.

Y dos aficiones ejemplares. La del Real, acostumbrada a los títulos, la del Atlético, forjada en el sufrimiento y la constancia. La hinchada del norte, la de Chamartín, y la del sur, de la Manzanares. Aficiones ejemplares. Sea cual sea el resultado de Milán, habrá ganado el fútbol español, y en concreto el madrileño. Nuestra ciudad se ha proclamado por méritos propios, capital europea del balompié, y eso nos llena a todos de orgullo y satisfacción, como diría nuestro Rey emérito.

Fuente: http://www.madridiario.es/