POR ANTONIO BOTÍAS, CRONISTA OFICIAL DE MURCIA

Conoce como nadie aquellos antiguos juegos que entretenían a nuestros abuelos, cuando nuestros abuelos eran zagales que brincaban acequias cuajadas de ranas. Vamos, anteayer. Porque Francisco López, vocal de juegos típicos huertanos en la Federación de Peñas, ha dedicado gran parte de su tiempo libre a mantener, impulsar y difundir las formas que tenían de divertirse en la huerta y los campos murcianos. Gracias a personas como él, y como muchos otros en peñas huertanas y asociaciones, se mantiene viva la práctica de los bolos y el caliche o las partidas de truque y brisca. Y si alguien desea aprender a jugarlos, también lo tiene muy fácil. En la federación, que dirige Juan Pablo Hernández, se imparten cursos de forma gratuita. «Estos juegos son una parte destacada de nuestra historia», asegura Francisco. Tiene más razón que un santo.

¿Cuáles son los principales juegos que había en la huerta de Murcia?

Pues, la verdad, es que eran muchos y muy variados, lo que evidencia la riqueza cultural de aquellos tiempos. Así, se solía jugar al truque, al caliche, la brisca, los bolos huertanos, el parchís, el cinquillo, el boli, el tute, la rayuela, el role, las tres en raya y las nueve en raya.

Para todos los gustos. ¿Cuándo y dónde se jugaban?

Estos juegos se jugaban después de la salida del colegio, prácticamente a todas horas en la calle. Y en casa, los juegos de mesa.

¿Era la única distracción del huertano o tenía otras?

Pues prácticamente era la única distracción. Ya se jugaba al fútbol en los bancales pues había pocos aparatos de televisión. Desde luego, no existía la oferta que existe en la actualidad para elegir cómo y dónde divertirse.

¿Considera que se están recuperando los juegos en los últimos años o debemos impulsarlos más?

Por lo menos lo estamos intentando desde la federación así como en las distintas peñas. Considero que están haciendo un gran trabajo en la recuperación y mantenimiento de los juegos, que son una parte muy destacada de nuestra rica historia.

¿Qué trabajos realizan para ello?

De muy diversa índole. Por ejemplo, se realizan talleres de juegos tradicionales, se invita a colegios e institutos a conocer cómo se entretenían sus abuelos en la huerta y en el campo y también impulsamos la promoción de estas actividades en los propios centros educativos.

A usted, ¿cuál es el juego que más le gusta?

Las nueve en raya y el caliche, siendo este el que ha tenido muy buena acogida. Desde el año 2008 se han constituido doce equipos femeninos, gracias a la promoción que desde la federación se hizo con su anterior presidente, Antonio Avilés.

¿Había antaño juegos para niños? ¿Cuáles eran?

Siempre ha habido juegos tradicionales en la huerta para el disfrute de los más pequeños: el boli, el role con las cajas de las cerillas, el marro (juego de pilla-pilla), el escondite, las canicas o los petos de barro (el ‘guá’ y el triángulo).

¿Ve necesario que las autoridades apoyen más los juegos tradicionales?

Desde luego. Es muy necesario e importante para que no se olviden este tipo de juegos de calle que divirtieron a nuestros abuelos como también ahora a nosotros. Y para ello, pongo por caso, sería aconsejable habilitar más espacios donde se pueda jugar y donde participen las distintas asociaciones que se dedican a ello.

¿A dónde deben dirigirse los murcianos que quieran aprender?

Pues lo tienen muy fácil. Basta con que acudan a la Federación de Peñas Huertanas. Y también a algunas peñas que ofrezcan este tipo de juegos.

Fuente: http://www.laverdad.es/