POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
La última de Paul Verhoeven se anuncia en el idioma original, “Elle”, marca de la casa para representar a Francia en Hollywood. La película es interesante, la actuación de Isabelle Huppert, muy buena, como la que protagonizó en “El porvenir” la semana pasada, y si éste fue un relato tristísimo, suavizado por escenas postaleras y citas de Rousseau, en “Elle” no hay postales ni filósofos que valgan y se muestra con el mayor cinismo la putrefacción de cada individuo en una sociedad que, salvo algunos brotes de violencia física, aparenta normalidad. Sin el humor que puede esperarse de Verhoeven (que reaparece tras varios años con poco y negro), los guionistas lían y enmarañan a los perversos agonistas con lazos de matrimonio, de parentesco, de conveniencia, sentimentales, sexuales, laborales…, en una sociedad corrompida e insostenible que, nunca tan mal dicho, nos es familiar.
Fuente: http://www.lne.es/