POR JOSÉ ORTIZ GARCÍA, CRONISTA OFICIAL DE MONTORO (CÓRDOBA)
Esta imagen vuelve a partir del archivo que me dejó mi amigo Pedro J. Delgado Guerrero de diapositivas escaneadas de don diego Muñoz-Cobo Fresco, uno de los fotógrafos que más instantáneas dejó de nuestra localidad para los años sesenta.
La calle Álvaro Pérez se inicia en la zona del Castillito para concluir en la calle Salazar. Entre su entramado hallamos dos pasajes conocidos desde el siglo XVII como Plazuela del Mayorazgo (Donde se encontraba el horno de los Terrones) y la encrucijada con la Torremocha.
Son muchas las voces que indican que el nombre le proviene a esta vía pública por un soldado de Fernando III El Santo cuanto tomó la población en manos musulmanas, pero la verdad no es esa.
En el siglo XVI un vecino de la localidad llamado Álvaro Pérez, concierta un contrato de venta con un vecino de Montoro para que éste le entregase, por una cantidad previamente pactada de dinero, el horno de los Terrones para que el Sr. Pérez pudiera de ese momento en adelante tenerlo por suyo propio y de sus herederos.
Al ser el único horno de esta calle el nombre de la misma ya estaba servido.
Desde hace años en esta calle se viene acogiendo la procesión de la Vera Cruz del Jueves Santo al cambiar su itinerario de San Miguel, también acoge al paso de la cofradía de la Humildad del Martes Santo y parte del recorrido penitencial del Cristo de las Penas.
También hemos de indicar que por esta calle se accedía al antiguo Juzgado sito en el edificio colindante con Torremocha y Biblioteca Municipal, además de hallarse colindante en la misma (calle Batalla de Lepanto) la Casa-Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
En 1873 tiene lugar la contratación por subasta pública de las obras de nivelación, embaldosado y reempiedro de la C/ Álvaro Pérez de Montoro por un importe de tres mil trescientas cuarenta y dos pesetas con treinta y tres céntimos, el cual fue ejecutado por el contratista Manuel Mialdea.
Con referencia a la fuente y poyato que vemos en esta imagen diremos que en 1882 se toma como referencia para abrir un expediente de subasta instruido para la composición y mejora de una parte de la C/ Salazar y que da principio en el poyato o muro que termina en la C/ Álvaro Pérez hasta llegar a la Plaza de Alfonso XII (Actual Plaza del Charco).