POR PABLO GALINDO ALBALADEJO, CRONISTA OFICIAL DE LOS ALCÁZARES (MURCIA)
En los primeros meses de 1936 el pueblo de Los Alcázares era un hervidero, constante ir y venir de militares, el Aeródromo genera trabajo y oportunidades para la población civil, se demandan servicios; alguien sugiere a Martín López Egea la conveniencia de “instalar un grifo de cerveza” dividiendo el espacio del taller-carpintería que regenta, junto a la iglesia de la Caridad, “van a traer más gente a la base”. Así se gestó un local de 4 x 5 metros con un mostrador de 3,50 metros y como mobiliario inicial dos veladores, seis sillas y seis banquetas. Se llamará “La Tropical”.
Empiezan las obras de acondicionamiento y se agrava la situación política, comienza la guerra civil y aumenta la población militar en Los Alcázares. Se tenía preparada la inauguración del local para el 25 de julio de 1936, llegada la fecha se abrió el negocio, Martín atendía carpintería y bar conjuntamente, servía refrescos y café -calentaba agua y lo servía en cafeteras individuales-, cuando no había clientes trabajaba la madera. Las ventas aumentaron, se cerró la carpintería y necesitó más ayuda en el bar. Después de la guerra el bar sigue funcionando, se ha ampliado y mejorado; incrementará la demanda, especialmente en verano. Será lugar de referencia por su buena barra y excelente servicio: cafés, aperitivos, refrescos, cerveza… (de las “Memorias de Martín López Egea 1906-1994”).
En 1948 se hacen cargo de la gestión del bar Pedro Alcaraz y su esposa Paca Marín, repartiendo beneficios con el dueño del local, Martín López. Pedro y Paca, junto con sus 4 hijas y un numeroso plantel de camareros dignificarán aún más “La Tropical” hasta finales de 1978 que se jubilan. Después será gestionado algunos veranos por otras personas, sin continuidad.
Al finalizar el verano de 1981 se hacen cargo del local Carlos Méndez y su esposa María Rosa Heredia, que regentaban “Cafetería Eugenia”; serán ayudados por toda su familia, pronto los hijos Juan Carlos y José Antonio se incorporan al trabajo y asumen responsabilidades. “La Tropical” toma impulso, la clientela aumenta, apetece entrar y saborear “una marinera, una cerveza, un café…”. El comedor con su coqueto mobiliario es acogedor, fotos antiguas del pueblo complementan y decoran las paredes, unas mesas colocadas en la calle Santa Teresa bajo toldo convierten en agradable el encuentro y la tertulia… prolongan espacios durante el verano con la terraza “Tropikopas” al inicio del Paseo de la Feria.
En mayo de 1992 fallece Carlos -el patriarca- haciéndose cargo del timón de la empresa la madre que, desde la cocina, coordina el trabajo junto con los hijos Juan Carlos y José Antonio. Durante los veranos y momentos de necesidad el resto de la familia arrima el hombro.
Productos de calidad, excelente servicio, agradable ambiente… sin perder el aroma de antaño hacen de este lugar punto de encuentro y referencia obligada en Los Alcázares. Es frecuente escuchar “quedamos en La Tropi”.
Desde hace tres temporadas, los hermanos Méndez Heredia están dando un aire fresco y atrevido a su carta de excelentes vinos y variado menú con platos innovadores, sin perder el sabor añejo de la cocina de doña María Rosa, ya jubilada.
Este año 2016 “La Tropical” cumple 80 años en el mismo sitio que Martín “instalara un grifo de cerveza”. Es motivo de celebración y homenaje a todas las personas que durante ocho décadas y desde ese lugar de trabajo han dignificado el nombre de Los Alcázares. Felicidades.