POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
El HUCA ha suspendido las cirugías ante la falta de camas por culpa de la gripe; también se desbordaron el Hospital Monte Naranco y el San Agustín de Avilés. Este invierno arrasa la epidemia, causa más víctimas que cualquier otra enfermedad, más que la carretera y con más gravedad que la polución, aunque padecerla tampoco inmuniza al paciente ante otras amenazas; uno puede estar saliendo de la gripe y entrando malamente en una curva peligrosa. En todo caso, es lamentable que las listas de espera del HUCA y las atenciones en urgencias se demoren cada día más sin dar tampoco solución al agujero del Cristo-Buenavista, de fantasmagóricos inmuebles sin contenido. Pronto una ordenanza distinguirá a los enfermos con DNI par o impar, para atenderlos en días pares o impares. Lo malo es que nuestra identidad se quiebre y terminemos convertidos en decimales.
Fuente: http://www.lne.es/