DURANTE EL ACTO SE HOMENAJEÓ A UNA DE LAS ASOCIACIONES MÁS EMBLEMÁTICAS DEL MUNICIPIO DE TEGUISE, LOS DIABLETES, CUYA TRADICIÓN RECORDÓ EL CRONISTA OFICIAL DE TEGUISE, FRANCISCO HERNÁNDEZ

Las fiestas de San Antonio en Los Valles (Teguise) y Tías tuvieron como protagonista de la noche del sábado el folclore. En la primera localidad, la Agrupación La Gran Aldea celebró su XVII Encuentro Folclórico, que tuvo como invitados a la Asociación Folclórica Jardín de Corvo, de Moya, y a Miguel Gil, de Firgas (Gran Canaria). Durante el acto se homenajeó a una de las asociaciones más emblemáticas del municipio de Teguise, Los Diabletes, cuya tradición recordó el cronista oficial de Teguise, Francisco Hernández.

Los Diabletes tienen su origen en la tradición popular fruto de la mezcla de creencias aborígenes con elementos castellanos y conexiones brujeriles nacidas, nacidas desde finales del siglo XV, cuando llegan a Teguisse los primeros esclavos moriscos y negros con sus prácticas supersticiosas, según recoge el Ayuntamiento de Teguise en la historia de esta manifestación cultural. En Teguise, la figura del diablete aparece encarnada en el macho cabrío, símbolo de la virilidad y fecundidad.

El fundador de La Gran Aldea, agrupación creada hace dos décadas, Marcial Cabrera, entregó al cronista un detalle de plata con la silueta del diablete.

Los grupos folclóricos de Gran Canaria agradecieron la invitación al encuentro y le entregaron un detalle al alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, quien felicitó a todos los miembros de agrupaciones musicales y de baile del Archipiélago «por mantener vivos nuestros símbolos de identidad y por seguir difundiendo la cultura folclórica de Canarias, tan rica, variada y con tanta personalidad».

El público asistente disfrutó de una degustación de productos típicos de la tierra para cerrar la velada.

En Tías, el terrero de lucha Ulpiano Rodríguez acogió el XXI Encuentro de Música Popular El Pavón con la presencia de este grupo y Tigaray, procedente del municipio tinerfeño de Los Realejos. El repertorio ofreció temas originarios de ambos lados del Atlántico. Uno de los momentos más emotivos de la noche llegó con la dedicatoria del tema inédito de El Pavón a la memoria de Jesús Israel Feo, fallecido en accidente de tráfico el pasado mes de marzo, quien fue componente de la citada agrupación. Fue el momento más emotivo de la noche con una sonada ovación por parte del público.

La exposición de vestimentas tradicionales de Lanzarote, del Cabildo, decoró el escenario. Las actuaciones concluyeron con la interpretación de Somos costeros a cargo de El Pavón y Tigaray.

Fuente: http://www.laprovincia.es/ – Aránzazu Fernández