JUAN RUBIO, CRONISTA OFICIAL, CONOCE MUY DE CERCA LA HISTORIA Y VIVENCIA RELIGIOSA DE SAN PEDRO AD VÍNCULA DE ESTA POBLACIÓN
Fue en el siglo XIX cuando perdió el nombre de San Pedro de Escañuela, pero la devoción no dejó nunca de crecer. San Pedro Ad Víncula es el patrón de este municipio del corazón de La Campiña, una advocación única en la provincia de Jaén. Cada año vive su momento álgido en La Víncula, el primero de agosto, pero se siente con intensidad los 365 días del año. Así quedó patente durante la presentación de la medalla lanzada por Diario JAÉN para Escañuela, una cita celebrada en el Ayuntamiento con su alcalde, Francisco Javier Sabalete, a la cabeza, y representantes de la cofradía. Juan Rubio, cronista oficial, conoce muy de cerca la historia y vivencia religiosa de San Pedro Ad Víncula de esta población: “Es un orgullo cómo todos sus habitantes llevan por delante esta devoción. Siempre tienen a su patrón en la boca, lo viven cada día del año”. “El alma de Escañuela está en esta medalla”, añadió. En este sentido, es muy significativo el dato de que esta cofradía tiene más de 850 hermanos en un municipio de unos 900 habitantes. “Cuando un niño nace, antes de salir del hospital en Jaén, ya está apuntado”, dice María José Urbano Alcalá, vicepresidenta del colectivo. También es destacable el peso de los escañoleros emigrantes en ella. Para todos, La Víncula es una cita imprescindible de reencuentro con sus raíces y su patrón cada verano. De hecho, la población puede llegar a triplicarse en torno a la celebración. Los momentos más emocionantes suelen ser su salida en procesión, con más de cuarenta paradas para “echar las banderas” a las familias —desde hace un par de años, con himno propio de San Pedro—, su recuerdo a los desaparecidos junto al cementerio y la llegada al templo. La música y los sentidos vivas en su interior son momentos que, con tan solo rememorarlos, los cofrades se emocionan. La hermana mayor ha sido, en este 2017, Gloria María García Sabalete y, tras las fiestas, le tomó el relevo Pedro Mateo Espinosa. Otro de los actos más emotivos es el del reconocimiento al hermano ejemplar, nombrado por la junta directiva para reconocer su devoción y su trabajo por el pueblo, que este año fue Jerónimo Urbano.
“Todos los que vienen de fuera se enamoran de San Pedro, de sus fiestas y de su gente”, dice María José Urbano. De hecho, como recuerda el alcalde, la solidaridad y la hospitalidad son rasgos que definen a los vecinos. No en vano, el lema que da la bienvenida a Escañuela es “pequeños de población, pero grandes de corazón”.
Los escañoleros ya pudieron conseguir la medalla de San Pedro Ad Víncula, fruto de la iniciativa con la que Diario JAÉN recorre todos los rincones de la provincia, apegados a las tradiciones y devociones más populares, de mano de la Caja Rural y la Diócesis. Esta refleja una imagen muy reciente de la talla de San Pedro realizada en 1942, por encargo de José Yanguas Messía, embajador en El Vaticano, por el escultor italiano Ferdinand Stuflesser. Como explicó Juan Espejo, director del periódico, existen pocas cuestiones que se compartan tan intensamente en un territorio tan extenso como las tradiciones y la devoción popular y Diario JAÉN tiene que reflejarlo. En este sentido, el alcalde reconoció la importancia de que Escañuela y municipios como este aparezcan en sus páginas, ya que ayuda a “estar, ser vistos y conocidos”. Asimismo, reconoció el valor del trabajo en equipo y la unión entre colectivos, vecinos y el Ayuntamiento: “Es importante que rememos todos en el mismo sentido”.
Fuente: http://www.diariojaen.es/