POR JOSÉ MANUEL TROYANO VIEDMA, CRONISTA OFICIAL DE BEDMAR Y DE GARCIEZ (JAÉN).
“La Real Asociación Española de Cronistas Oficiales es, entre otras muchas cosas, una forma de hermanar a todos y todas los/as Cronistas Oficiales que se encuentran repartidos/as por cada uno de los rincones de la geografía nacional”. De Antonio Luis Galiano Pérez, (2014).
Introducción.-
Con ellos se inició la actual etapa de los Cronistas Oficiales de los “lugares, villas, ciudades, provincias y regiones” de España.-
BARCELONA:
Don Víctor BALAGUÉ CIRERA (Barcelona, 11/XII/1824-Madrid, 14/I/1901). C. O. de Barcelona desde 1853
Fecha y lugar de nacimiento: Barcelona, 11/XII/1824.
Fecha y lugar de defunción: Madrid, 14/I/1901.
Cronista Oficial de: Barcelona.
Fecha de nombramiento:
En 1853 fue nombrado Cronista Oficial de Barcelona, adoptando el lema “En todo, por todo, para todo, Cataluña”.
Fecha de posesión: 1853.
Estudios: Estudió en la escuela de Pedro Labernia y dio clases con Buenaventura Bassols, entrando, en 1839, en la Universidad de Barcelona, donde obtuvo, en 1844, el título de Bachiller en Jurisprudencia. En 1845 dejó los estudios para la licenciatura y marchó a Madrid, donde trabajó en el Semanario Pintoresco Español y La Iberia Musical y Literaria y para la Sociedad Literaria de Ayguals de Izco. Pero la poca realización de sus perspectivas le llevó de nuevo a Barcelona poco tiempo después, donde desarrolló en los años siguientes una intensa actividad literaria, periodística y asociativa entre 1848 y 1854. En 1849 contrajo matrimonio con Dª. Manuela Carbonell y Catalá.
Profesión: Político, escritor, periodista, historiador, Cronista y mecenas cultural. Desde finales de los años cuarenta utilizó de modo complementario la literatura, el periodismo, la historia, la dinamización cultural y la Política para desarrollar una propuesta ideológica liberal y catalanista, de signo descentralizador, federal e iberista, que le convertiría en las dos décadas siguientes en el principal impulsor del catalanismo progresista y del sector liberal de la Renaixença.
Cargos desempeñados:
Realizó su entrada definitiva en política con la Revolución de 1854, fue miembro de la Milicia Nacional de Barcelona y Secretario del Círculo Liberal de Amigos del País (1855) y fundó y dirigió el periódico La Corona de Aragón (1854-1856), desde el que desarrolló su programa catalanista y progresista, y la revista La Ilustración (1856). Tras la liquidación del Bienio Progresista, sus diferencias con el editor le llevaron a dejar el periódico y a fundar y dirigir con Cutchet El Conceller (1856-1857). Corresponsal de Guerra en Italia del diario barcelonés El Telégrafo (1859-1860). Como Diputado Provincial por el Partido Progresista, en 1863 elaboró una propuesta —aprobada en su mayoría— del nomenclátor para las nuevas calles del Ensanche barcelonés, con nombres relativos a la identidad histórica, política y cultural de Cataluña.
Se exilió entre 1865 y 1868, regresando a España con la Revolución Gloriosa. Tras la Revolución de 1868 fue presidente y vicepresidente (la presidencia recaía en el gobernador civil) de la Diputación Provincial de Barcelona (del 2 de octubre de 1868 al 5 de febrero de 1869) y de la Junta de Instrucción Pública, vocal de la Junta Revolucionaria definitiva y gobernador civil interino. Presidió el Círculo Liberal de Barcelona. Diputado por la circunscripción de Manresa en las Cortes Constituyentes de 1869, trabajó para conseguir la descentralización en las leyes municipal y provincial, realizó numerosas gestiones para municipios catalanes, se interesó por la situación de la educación y de los maestros, y defendió los intereses industriales catalanes ante el arancel de 1869 y los tratados de comercio de 1870.
Fue Director General de Estadística (19/VII/1869-19/XII/1869), que llevaba aparejada la Vicepresidencia de la Junta del ramo, asistiendo al Congreso Internacional de La Haya. En estrecha relación con Prim, intervino en la cuestión de las candidaturas para el trono español, desempeñando en 1869 una misión diplomática secreta en Prusia y formando parte de la Comisión de Diputados que se desplazó a Italia para notificar a D. Amadeo de Saboya su nombramiento como rey de España. Fue Director General de Comunicaciones, que bajo su mandato pasó a llamarse Correos y Telégrafos (10/I/-10/X/1871), cargo desde el que abarató el franqueo de libros y de prensa y puso las bases para la formación de un sistema telegráfico como servicio público.
Ante la fragmentación de las fuerzas liberales, se situó en el sector conservador o constitucional de Sagasta, llegando a ser Ministro de Ultramar (5/X/-21/XII/1871) y de Fomento (26/V/-13/VI/1872) y Vicepresidente del Congreso (1872). Tras el golpe de Pavía fue Ministro de Ultramar por segunda vez (3/I/-13/V/1874) e interino de Fomento (3 y 4/I/1874) y Presidente del Tribunal de Cuentas (26/VI/1874-25/I/1875), dimitiendo tras el pronunciamiento de Martínez Campos. Durante la Restauración fue nuevamente Vicepresidente del Congreso (1881-1882 y 1886). En 1881 fue también Senador electo por Barcelona y en 1884 y 1886, Diputado electo por La Habana por la Unión Constitucional, donde llegó a presidir la Diputación cubana (1886).
Distinciones recibidas:
Entre otras señalar que fue socio fundador en 1848 de la Sociedad Filarmónica y Literaria, cuya revista La Violeta de Oro fundó y dirigió en 1851.
La Real Academia de Buenas Letras de Barcelona, le acogió en 1853 como Académico de Número. Fue uno de los impulsores de los Juegos Florales de Barcelona en 1859, siendo miembro de su consistorio en ésta y en sucesivas ediciones y Presidente en 1868 y el primer poeta en obtener la distinción de Mestre En Gai Saber (1861). Como poeta firmaba con el pseudónimo: “Lo Trobador de Montserrat”.
En 1875 ingresó en la Real Academia de la Historia (era miembro correspondiente desde 1865) y en 1883 de la Real Academia de la Lengua Española. Fue directivo de diversas sociedades, como El Fénix Español (después La Unión y el Fénix Español) desde 1873, la Compañía de los Ferrocarriles Directos de Madrid y Zaragoza a Barcelona desde su creación en 1881 como ampliación de la Valls-Villanueva-Barcelona, la Compañía de los Ferrocarriles de Tarragona a Barcelona y Francia, tras la fusión con la anterior en 1886, y la Compañía General de Tabacos de Filipinas desde 1886, entre otras. Recibió condecoraciones de Turquía e Italia y la española Gran Cruz de Carlos III, rechazando un título nobiliario.
Libros publicados:
Historia de Cataluña y de la Corona de Aragón -(primera historia completa de Cataluña en época contemporánea, 1860-1864)-. Las calles de Barcelona (1865). Pepín el Jorobado o el hijo de Carlomagno (1838). Enrique el Dadivoso (1847). Juan de Padilla (1848). Vifredo el Velloso (1849)…
Artículos históricos o científicos publicados:
Estudios y ensayos en catalán: Bellezas de la historia de Cataluña: Lecciones pronunciadas en la Sociedad Filármónica, 1853. Historia política y literaria de los trobadores (1878-1879). Instituciones y reyes de Aragón (1896). La libertad constitucional (1857). Memorias de un constituyente (1868). El Regionalismo y los Juegos Florales (1897). Odonimia de Barcelona. D. Víctor Balaguer siempre admitió ser sólo un divulgador que sentía amor por la historia local de la sociedad catalana-
(CONTINUARÁ) CON EL FIGURA DE OTRO CRONISTA OFICIAL Don Ramón de Mesonero Romano (Madrid)