POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Les cuento.- El 21 de enero de 1910 se estrenó en el madrileño Teatro Eslava la zarzuela-opereta, o como quieran llamarla, titulada LA CORTE DEL FARAÓN. Una parodia humorística y picantona en contraposición a la seriedad escénica de la ópera Aida .-En su tercer acto se cantaba un aria que, por su contenido sexual e insinuaciones picarescas, fue prohibida en los primeros tiempos de la dictadura franquista. Cosas de la censura.-
Muchos de ustedes recordarán aquella escena que decía :
«¡Ay, Ba ! , ¡Ay, Ba!,
¡Ay, Babilonio que marea…!
¡Ay, Ba! , ¡Ay, Ba!
¡Ay , vámonos pronto a Judea!
¡Ay, Ba! ¡Ay,Ba!
¡Ay , vámonos allá!»
Los autores del libreto de esta zarzuela fueron Guillermo Perrín Vico y el médico gijonés ,que nunca ejerció la medicina, y sí la literatura, don MIGUEL DE PALACIOS (Gijón 1863-Covadonga 1920).-
Pues, ¿saben ustedes? .- Don MIGUEL DE PALACIOS era asiduo visitante-veraneante en Colunga , enamorado de sus paisajes, de sus playas, de sus manzanas… Poco antes de morir , en agosto de 1920, escribió este precioso poema dedicado a su municipio colungués de descanso :
«Colunga, vergel de flores / de la región asturiana,
que el blanco celaje envuelve / las cumbres de tus montañas.
Llenan tus valles amenos / las extensas pomaradas,
y el aire que se respira / tiene sabor a manzana.
El mar, el valle y el monte / te tienen aprisionada :
el mar te da sus riquezas / entre redes plateadas.
El valle te da sus frutos / y con ellos su fragancia…
El monte te da sus brisas / salud para cuerpo y alma.
Tus mujeres son graciosas , / con picardía en la cara;
dulces para su cariño / y al hablar al hombre cantan…
Y son los hombres valientes / y algunos de aquella raza
que acompañando a Pelayo / reconquistaron España.
En alegres romerías / por las rientes montañas,
van los mozos y las mozas / bailando al son de la gaita.
Y son tus cantos tan dulces / como dulces tus manzanas,
y ácidos son los cantares / como tu sidra, que encanta.
Y cuando cae la tarde / de tu iglesia las campanas
dejan en el monte el eco / que va a perderse en las plantas…
Aquí llegué a descansar / de aquella vida mundana
que detrás de aquellos montes / tus ilusiones nos mata.
Y al despertar de este sueño / en una alegre mañana,
vive el poeta y renace / y en sus alegrías canta :
¡Colunga, vergel de flores / de la región asturiana,
tranquila como tus valles / dulce como una alborada.!
Hermosas son tus mujeres / y tus montes y tus playas ;
donde las olas te traen / del tiempo las añoranzas.-
Y son tan dulces tus cantos / como dulces tus manzanas ,
y tus montes siempre verdes / traen color de esperanzas.-
Miguel de Palacios.- Colunga, 10 de Agosto de 1920
No añado comentario alguno. Le dejo en sus sentires y en su amor a Colunga.