POR SANTIAGO IZQUIERDO, CRONISTA OFICIAL DE SAN SEBASTIÁN DE LOS REYES (MADRID)

San Sebastián de los Reyes fue fundado por Real Cédula de los Reyes Católicos el día 2 de mayo de 1492. Este nuevo pueblo nacía por la voluntad de 32 familias de la villa de Alcobendas, familias que no podían sufrir por más tiempo el ominoso yugo de su despótico señor, Juan Arias de Ávila, señor de Alcobendas, San Agustín de Guadalix y Torrejón de la Calzada.

Estos primeros vecinos que se asentaron en el Cerro del Clavel, junto a una ermita dedicada al mártir San Sebastián, cuyo terreno pertenecía al concejo madrileño, y por tanto se apartaban de su señor natural, acogiéndose a una Provisión Real que dictaron Isabel y Fernando, ante las tropelías que venían sufriendo por parte de la familia Arias: destrucción de viviendas, matanzas de ganados, destrozos de cosechas e incluso apresamientos de varios vecinos.

Al ser conocidos estos hechos por el Rey Fernando a su paso por el Puente de Viveros, es cuando ordenan expedir la Real Cédula, e incluso ellos dieron el nombre del nuevo pueblo: San Sebastián por la ermita a cuyo alrededor habían surgido las primeras viviendas y de los Reyes por la protección que ellos les concedían.

A pocos metros de la Ermita de San Sebastián discurría el Camino Real que iba de Madrid a Burgos, y en torno a él se fueron edificando numerosas viviendas a un lado y otro del mismo, conocida esta vía desde sus inicios como la calle Real.

Esta calle ha sido durante siglos, y en parte aún lo sigue siendo, la espina dorsal de este pueblo, hoy convertido en ciudad con más de 84.000 habitantes.

Por ella han pasado y han acaecido todos los hechos más festivos y por supuesto, también algunos penosos como la invasión francesa en 1808.Esta calle hasta los años 50 del pasado siglo era parte de la carretera de Francia, y por ella discurrían en siglos pasados todas las retahílas de carros que desde Castilla la Vieja surtían de productos a la corte. Al ser la calle de más tránsito y concurrencia de la localidad ha sido, por tanto, la más comercial, en ella se han ubicado los principales comercios, cafeterías, oficinas bancarias, etc.

Hasta aquí algo normal en una calle neurálgica de un municipio. La principal razón de traer a estas líneas la calle Real no es por su actual decadencia, pues ha perdido toda su animación y luce un aspecto bastante deplorable en comparación con otras calles reales de otras poblaciones, sino por su aspecto más festivo debido a que todos lo años a finales de agosto discurren por ella las mayores y más conocidas tradiciones que tiene San Sebastián de los Reyes, la procesión del Santísimo Cristo de los Remedios y sus internacionales encierros.

La tradición de correr toros en esta localidad se remonta a los primeros años de su fundación, a finales del siglo XV.

En el Archivo Municipal se conserva una provisión de 1525, emitida por la Real Cancillería en la se menciona dos veces la costumbre de correr toros que tenían los de San Sebastián. El pueblo se había fundado hacía poco más de treinta años, es decir, que podemos asegurar que sobre la Calle Real se llevan corriendo encierros más de 500 años.

Una de las particularidades de nuestro ancestral encierro, declarado de interés turístico, es que a diferencia de otras localidades de gran raigambre aquí los toros que se corren son los que van a ser lidiados por la tarde, de ahí que nuestra fama haya traspasado fronteras y sean los segundos más importantes de España.

Su trazado ha variado a través de los años, en un principio los toros eran conducidos en manada desde la ribera del Jarama, y hacían su entrada a lo largo de la calle Real hasta desembocar en la Plaza del Ayuntamiento.

Posteriormente cuando esta manera de traer los toros se suprimió, debido a que ya resultaba peligroso, se instalaron unos corrales al final de la calle Real y al construirse la nueva plaza de toros se buscó la ubicación de los corrales dentro del casco urbano, primero en la Avenida y después en el Matadero.

Recientemente se ha construido un complejo de corrales de suelta junto al Paseo de Europa, como se aprecia en lo anteriormente expuesto el encierro ha discurrido desde distintos puntos geográficos de la localidad, pero siempre todos han tenido un denominador común: la calle Real.

Fuente: http://www.ssreyes.org/