POR MANUEL. GARCÍA CIENFUEGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN
Álvaro Torres Rodas (1886-1940), pintor, fotógrafo y empresario artístico de Montijo, estudió en Madrid y perfeccionó sus conocimientos sobre dibujo, pintura y fotografía de manos de los maestros que impartían clases en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y en el Círculo de Bellas Artes.
Se encaminó por el estilo pictórico del costumbrismo regionalista que aprendió de los extremeños Felipe Checa, Eugenio Hermoso y Adelardo Covarsí, de quien disfrutó de su amistad.
La Comunidad de Labradores
Tras fundarse, en 1902, la Comunidad de Labradores para la defensa de los intereses económicos y la formación de sus asociados, Álvaro Torres entró a formar parte de ella, animando a la Junta Directiva, años más tarde, para que le encargase un cuadro a su amigo Adelardo Covarsí (1885-1951).
Fue entonces cuando la Comunidad le encargó al pintor pacense el cuadro “Jornalero extremeño”, idea que apoyó y propició el secretario de la Comunidad Julio García Pérez, hombre muy sensible por la cultura. Obra que refleja la realidad social del personaje, dulcificado por el paisaje que pinta como fondo el maestro extremeño de las escenas del campo, la caza, los campesinos y el paisaje.
A comienzos de 1919 la Junta Directiva de la Hermandad de Labradores adquiere un inmueble en la hoy calle Felipe Checa, propiedad de Casimiro Codes Rodríguez; calle que fue llamada popularmente la “Barrera del Sindicato”. Tres meses después, según proyecto de Antonio del Viejo Guzmán, sobrino del maestro de obras Cristóbal Sánchez García se le adjudicaban a este último las obras. El nuevo edificio acogió la sede y servicios administrativos de la Comunidad de Labradores. Instalándose la biblioteca y varias colecciones de animales, vegetales y minerales.
En diciembre de 1921 se acordaba adquirir el mobiliario que fue diseñado por la casa “El Progreso” de Ramón Salas de Badajoz. La sede social fue inaugurada en 1924, cuando hacía poco que el general Primo de Rivera había tomado el poder en España. Fue cuando Álvaro Torres debió colgar en el Salón de Sesiones de la Comunidad el cuadro de Adelardo Covarsí, su amigo y admirado pintor que le fue donado por él y éste a los labradores de Montijo, asociados en la Comunidad, de la que era presidente Pedro Miguel Rodríguez Bautista.
En 1997 se decretó el final de las Comunidades Agrarias, pasando la titularidad de sus bienes a la Junta de Extremadura, entre ellas el cuadro del “Jornalero extremeño”, desde entonces en la consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, junto con su fondo documental, entre los que están varios tratados de agricultura y parte de las colecciones. Todo con la aquiescencia de las autoridades del momento que permitieron que se llevaran el patrimonio de los labradores de Montijo
Se pide que el cuadro vuelva a Montijo
Desde entonces han sido varias las reivindicaciones y peticiones para que la Junta de Extremadura devuelva el cuadro de Covarsí a Montijo.
En el marco de las IX Jornadas de Historia de Montijo, celebradas en octubre de 2010, se solicitó que el cuadro regresará a Montijo. En este sentido han sido varias las preguntas y solicitudes de los grupos políticos con representación en la Corporación Municipal pidiendo su reintegración a Montijo.
El actual Gobierno municipal del Partido Socialista, trató la devolución del cuadro en enero de 2017, en la entrevista mantenida entre el alcalde y el presidente de la Junta de Extremadura. A comienzos de agosto de 2017, en la reunión celebrada entre el alcalde y la consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, en cuyo despacho estaba el cuadro de Covarsí, abordaron la devolución a Montijo del mismo.
En este encuentro entre la consejera y el alcalde, según manifestó éste, se había llegado al acuerdo de una cesión indefinida al Ayuntamiento de Montijo, aunque el propietario del mismo seguiría siendo la Junta de Extremadura. Quedaría colocado en el futuro Museo de Agricultura.
El pasado 20 de junio la Consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, comunicaba al Ayuntamiento de Montijo que el cuadro podía ser trasladado a Montijo, instalándose, provisionalmente, en el despacho de la Alcaldía
Jornalero Extremeño
Fiel a sus postulados pictóricos, Adelardo Covarsí muestra sobre el lienzo, la realidad de un jornalero, de un hombre del campo extremeño. Covarsí lo viste con chaleco, camisa, sombrero, alforja, cantimplora y zacho sobre el hombro. Las líneas están perfectamente dibujadas, acentuado su quehacer sobre el rostro y las manos del jornalero, de aspecto serio, curtido y taciturno. Un cigarro en la boca rompe la sobriedad del personaje.
Las manos y brazos hablan de trabajo, sudor, jornal y fatiga. Resalta el pintor las venas en manos y brazos del jornalero que aseveran así ser apto para el oficio. Manos anchas, grandes, ásperas y fuertes. Encallecidas de arañar la tierra en esta extremadamente dura región, azotada por el olvido, el subdesarrollo, la opresión y la miseria. De tremendas desigualdades sociales entre amos del latifundio y criados que les sirven, en aquellos años de la dictadura primorriverista.
Adelardo Covarsí dispone para el fondo del “Jornalero extremeño”, el paisaje que tan acertadamente supo estampar. Tintes amarillentos, rosáceos, parduscos, azules, violetas, verdes, marrones… Que saben a jaras, encinas, cantuesos, barbechos, brezo, tomillo, rastrojos y anchas besanas en las que luego se erguirá el trigo. Porque todo en Covarsí sabe a campo, a caza, trabajo, campesinos, paisaje y paisanaje. Donde faenaron aperadores, labradores, mozos, manaderos, braceros, jornaleros, zagales y rapas, en medio de los surcos, los barbechos y las rastrojeras. Arando, sembrando, cuidando, segando, trillando y almacenando. Pues así transcurría el rito del ciclo que, en su esencia, en su raíz, trae la vida, la dureza de los quehaceres y sus días.
Tras más de veinte años de peticiones y solicitudes, por fin, el “Jornalero extremeño” de Adelardo Covarsí está en Montijo, provisionalmente en el despacho de la Alcaldía, hasta su ubicación definitiva en el proyectado Museo de la Agricultura que acogerá el edificio de la Comunidad de Labradores. Enhorabuena.
Bibibliografía Utilizada: BARRAGAN LANCHARRO, A.M.: La Comunidad de Labradores de Montijo: Orígenes, constitución y vida social agraria hasta 1920. Revista de Feria y Fiestas Patronales de Montijo. Año 2011. GARCÍA CIENFUEGOS, M.: Un Covarsí en Montijo. Revista Agla, núm. 3. Montijo 1984. LA COMUNIDAD DE LABRADORES DE MONTIJO. HISTORIA Y COLECCIONES. Coordinado por Antonia Gómez Quintana. Montijo 2007. MOLANO GRAGERA, J.C.: Álvaro Torres Rodas. Pintor, fotógrafo y empresario artístico de Montijo (1886-1940). Revista de Feria y Fiestas Patronales de Montijo. Año 2011.