LA DOCTORA EN FILOLOGÍA ROMÁNICA Y CRONISTA OFICIAL DE FUENTES DE AYÓDAR Y DE TORREALBA DEL PINAR (CASTELLÓN) NATIVIDAD NEBOT CALPE, DESTACA QUE «EL AUTOR EXPONE EN ESTA OBRA SU TEORÍA PSICOLÓGICA ACERCA DEL AMOR CON TAL AGUDEZA DE OBSERVACIÓN Y ALTURA DE PENSAMIENTO QUE LEERLA CAUTIVA, MANTIENE LA ATENCIÓN Y ENTRETIENE»
«Las nubes han tomado lecciones de mis ojos / y todo lo anegan en lluvia pertinaz». Explorador de los laberintos del amor, Ibn Hazm será el protagonista el próximo viernes del Día Mundial de la Poesía en Córdoba. Sus versos, su peripecia y su pensamiento estarán presentes en una velada organizada por la Delegación de Cultura del Ayuntamiento como homenaje a esta relevante figura de la Córdoba del siglo XI, político y pensador, víctima de la crisis del Califato, nacido en 994 y fallecido en 1064, hace 950 años.
Y hasta el monumento a Ibn Hazm realizado en 1963 por Amadeo Ruiz Olmos (para el 900º aniversario de su muerte) y ubicado en la Puerta de Sevilla se desplazaron ayer el teniente de alcalde de Cultura del Ayuntamiento, Juan Miguel Moreno Calderón, y algunos de los participantes en las actividades para subrayar la importancia de este «cordobés errante» cuya aportación literaria más notable fue El collar de la paloma, escrito hacia el año 1022 en Játiva. Un «estudio realista acerca del amor y las costumbres en los usos amorosos hispanoárabes del siglo XI» que «constituye un fiel reflejo de su época», según la doctora en Filología Románica y cronista oficial de Fuentes de Ayódar y de Torrealba del Pinar (Castellón) Natividad Nebot Calpe, que destaca que «el autor expone en esta obra su teoría psicológica acerca del amor con tal agudeza de observación y altura de pensamiento que leerla cautiva, mantiene la atención y entretiene» a pesar de los casi 1.000 años que nos separan de ella.
Emilio Tornero Poveda, profesor emérito del Departamento de Árabe de la Universidad Complutense de Madrid y que recientemente ha publicado la obra Teorías sobre el amor en el mundo árabe medieval (Siruela), destaca que «una de las características más importantes de El collar, que la distingue de los otros tratados, es que su material de reflexión está sacado, en gran parte, de experiencias personales y no de historias ficticias o legendarias de amantes».
La condición errante del homenajeado vertebrará la conferencia que el profesor de la Universidad de Córdoba Juan Pedro Monferrer Sala ofrecerá el viernes en la sala Orive (a partir de las 20:00), a la que seguirá un recital poético sobre los textos de Ibn Hazm a cargo de Matilde Cabello, Carlos Clementson, Juana Castro y José de Miguel.
Pero los actos del Día Mundial de la Poesía (la decisión de proclamar el 21 de marzo como tal fue aprobada por la Unesco en París en 1999) en Córdoba arrancan hoy con uno de los citados, Carlos Clementson, que presenta a partir de las 20:00 en el Salón de los Mosaicos del Alcázar de los Reyes Cristianos su nuevo poemario, Córdoba, ciudad de destino (Quadrivium), «una guía espiritual» de la ciudad desarrollada a lo largo de casi 200 páginas y por la que desfilan sus más insignes hijos. El poeta revisa y ensalza «el legado poético, filosófico, intelectual, heroico e histórico que las grandes figuras nos han ido dejando». Entre ellas, por supuesto, está Ibn Hazm, que inspira a Clementson, infiltrado en su alma, estos versos de exilio y recuerdo de la ciudad perdida: «Sin embargo te llevo aquí grabada / como a fuego en mi pecho, en la memoria / de lo que fue perfecto un día y toda / la hermosura feliz de mi universo».
Clementson recoge el concepto de «ciudades de destino» acuñado por Arnold J. Toynbee para constatar que «a lo largo de dos mil años Córdoba ha sido una ciudad rectora y generadora» de la que ha surgido una caudalosa relación de pensadores, poetas y artistas «de primera magnitud y en diversas culturas y lenguas: latín, castellano, hebreo, árabe». El también profesor titular de Literatura Española en la Universidad de Córdoba considera que «hay que tener conciencia de lo que hemos sido para estar a la altura de ello».
Encabezado por citas de Juan de Mena, Luis de Góngora, Miguel de Unamuno y Julián Marías, Córdoba, ciudad de destino arranca con un poema titulado Antepasados («Ignotos, primitivos moradores anónimos / que poblasteis ayer estas anchas riberas / matinales, purísimas, en la aurora del mundo»…) y se detiene en Séneca, Lucano, Averroes, los poetas cordobeses de Al-Ándalus, Luis Carrillo y Sotomayor, Luis de Góngora, Ángel de Saavedra, Julio Romero de Torres, Ginés Liébana, Julio Aumente, el Alcázar de los Reyes Cristianos, la plaza de la Trinidad, la Ribera y otros muchos personajes y espacios.