POR MARÍA TERESA MURCIA CANO, CRONISTA OFICIAL DE FRAILES (JAÉN)
Cuando el viajero o visitante llega hasta Frailes (Jaén), es frecuente la pregunta: ¿de dónde viene el nombre de Frailes? Pues a ello vamos a intentar dar respuesta.
No son muchos los yacimientos prehistóricos conocidos al día de hoy en el término municipal de Frailes, y ninguno de ellos ha sido objeto de una investigación sistemática y rigurosa. Durante el Paleolítico existieron lugares aptos y estratégicos para la caza, aprovechados por los cazadores neanderthalenses, con agua abundante en los alrededores, y fuentes de materias primas tan importantes como el sílex. A partir del Neolítico los primeros grupos productores pudieron disponer de una serie de recursos potenciales para el desarrollo de una ganadería y de una agricultura que, como base de su estructura económica, les permitiría vincularse poco a poco a los lugares de pasto para sus ganados y a sus tierras de cultivo tras los primeros ensayos realizados en esta dirección desde un modo de vida regido inicialmente por una economía en la que la actividad cinegética continuó teniendo una gran importancia y en el que fue habitual el tipo de hábitat en cueva [1].
Las tierras del llamado hinterland fenicio, es decir el interior de las provincias de Granada y Málaga, así como sus comarcas circundantes entre las que se encuentra la Sierra Sur de Jaén, participaron en este proceso general de intercambios aportando lo que había sido la riqueza de los antiguos poblados de la Mesa y la Gineta: productos agrícolas y ganaderos, a cambio de envases industriales de cerámica (ánforas), vajilla alfarera de lujo, tejidos, manufacturas, hierros, etc. Una nueva forma de vida que no solo quedaba reflejada en las producciones materiales, sino en una especial manera de entender el mundo, tanto en lo referente a las relaciones políticas como en la interpretación religiosa de la propia realidad.
Tal vez esta sea la datación para la llamada Venus de Frailes, localizada en la cueva de la Cabeza del Moro, que se encuentra en el paraje de las Nogueruelas en el término municipal de Frailes, pero ya lindando con Alcalá la Real. Se trata de una figura antropomorfa, en bajo relieve, femenina, con dos piernas, brazo izquierdo, pecho izquierdo, no está claro que tenga la cabeza más bien parece decapitada. En la parte derecha no se le ve bien el brazo, más bien parece que había un elemento que se ha perdido o que estuviera sustentando a otro tipo de elemento y lo que es evidente a partir del modo en qué está hecha y por sus facetas.
El abrigo o cueva de la Cabeza del Moro está en un lugar estratégico, en los límites entre Alcalá la Real y Frailes. Cuenta con un dolmen funerario y muchos vestigios prehistóricos y todo hace presagiar que la figura tenga algo de especial.
La presencia romana en el territorio de Alcalá la Real es consecuencia directa de la Segunda Guerra Púnica. La conquista de toda esta región fue finalizada por Tiberio Sempronio Graco en los años 180-179 a.C., quien en una campaña desde el Guadalquivir, conquistó todos estos territorios. Y seguimos sin saber nada de Frailes, ni de su nombre que es lo que nos interesa para este trabajo.
Habrá que esperar al islam para saber algo de Frailes. Entorno al año 1220 hubo un alfaquí llamado Alí b. Ismail b. Alí al-Saidi al-Frayasi. La única referencia es por el patronimico Alfrayasí ]2] localidad de procedencia del alfaquí, cuyo nombre parece tiene un origen no árabe, lo que nos lleva a pensar que pudiera ser íbero. De Abu l-Hasan al-Afralyasi sabemos que fue un virtuoso alfaquí, tradicionista y narrador de Adab, predicó en la alhama de Alcalá musulmana y se hizo cargo de la oración, también se ocupó de la lectura del Corán [3].
Era la primera vez que en una publicación veía escrito el nombre de Frailes, pero poco más. Así que decidí buscar información sobre el posible origen árabe del nombre y he aquí que conocí a Eustasio Sánchez Fernández-Villaran, y muy amablemente decidió ayudarme. En una de sus cartas me dice: respecto al pueblo de Frailes con su origen árabe, hoy sus habitantes se llaman fraileros, no tenía noticias de su nombre inicial. He mirado en el diccionario que tengo de árabe literal y no sale palabra alguna con relación.
En el Diccionario del padre Lerchundi, en la edición de 1932, viene Frailio o Fraili. Palabra que viene del español y significa fraile, o sea de los franciscanos. Piensa Eustasio que Frailes durante la dominación árabe no pasó de ser una simple aldea, insignificante por la baja población en general.
Al poco tiempo vuelvo a recibir otra carta en la que me comunica la consulta que ha realizado a un amigo que vive en Maruecos y copia la carta: Creo que ese pueblo [Frailes] tenía entonces muchas plantas o árboles de alcornoque en árabe es alfayal. La otra interpretación corresponde en que cultivaban el rábano que llaman alfardin, y hay monedas con este nombre. En ambos nombres (al) es el artículo que se suele añadir con frecuencia.
En cuanto a la posibilidad de estar esta zona entonces llena de alcornoques no resulta extraño; los olivos suponen un cuidado especial. En mi kabila -Angera-, al otro lado del estrecho hay en todas las partes agrestes gran cantidad de alcornoques, que no plantó nadie. Algunas veces se decía por allá el corchón. ……
Por lo que va a la otra posibilidad, cabe decir que Frailes tiene tierra fértil y agua abundante. En tal caso los moros hacen con facilidad huertas ( garsu) en cualquier lado que cultivan mal, su indolencia. ….
Luego puede que Frailes, si es que es un nombre árabe puede que signifique Alcornoque, o Rábano, pero es difícil de demostrar. No fue la última noticia; pregunté a una frailera especialista en árabe y me contestó: Creo que el nombre Alfrayas no proviene de una palabra árabe, y esto tiene principalmente una explicación gramatical. Todas las palabras en árabe se basan (salvo contadas excepciones) en una raiz trilitera, de tres consonantes, a la que se le añaden desinencias. Según esa regla, y según los modelos de derivación, la palabra Alfrayas no se basa en una raiz trilítera, ni coincide con ninguno de los modelos.
Si no es palabra árabe, quiere decir que Alfrayas es la transcripción en árabe de la denominación del lugar antes de la conquista, y esto, (siempre desde un punto de vista morfológico de la palabra), tiene más lógica. Podría venir de la palabra “fraile” ….
María Frías Gómez se pregunta si en la zona existían frailes antes de la llegada de los árabes. La respuesta es sí. Por un lado en Alcaudete y Castillo de Locubín estaban los frailes calatravos; y no es de extrañar que por la zona de frailes tuviesen algunas propiedades, de ahí que se dijese frailes, que pertenecía a los frailes. Y esta es otra posibilidad.
En la Crónica del Condestable Miguel Lucas de Iranzo podemos leer: … algunos ladrones almogávares habían salteado unas acémilas de dicho Condetable, mandando este un alguacil mayor a perseguir a los almogávares y fueron a dar a una nava que se dice Frayles, cerca de Alcalá la Real. … [4]
Creemos que se refiere al lugar que conocemos como Villa de Frailes. Y sí la primera impresión que da al acercarse a Frailes es de una nava, tierra llana, sin árboles, rodeada de montañas. Es el aspecto que presenta Frailes cuando te acercas por el camino del Dornajuelo, camino antiguo que conduce a Alcalá la Real o desde la Martina.
Según el cronista Oficial de Alcalá la Real Antonio Guardia Castellano [5], en 1495 Frayles tenía 24 vecinos y lo que nos lleva a pensar que ya existía de antiguo. La siguiente noticia sobre Frailes nos la proporciona el Archivo Municipal de Alcalá la Real (AMAR). Según un padrón de 1587 el número de habitantes ha descendido, ahora son 17 vecinos.
Sabemos que en 1621 había en Frailes 29 casas con la peculiaridad de tener el huerto alrededor de ella; las huertas con mayor número de casas eran las de Pedro Jaraba, Rodrigo Cabrera, Pedro Sánchez, y la huerta de Santa Lucía, que era el lugar más habitado y que creemos que corresponde a lo que hoy es el Barrio de la Iglesia. En 1752 había un total de 75 casas de teja y 43 de retama. Con los datos que nos aporta el padrón de 1753, llamado de la única contribución, observamos un notable aumento en la población, pues desde los 68 habitantes de 1587 se había pasado a los 651 del siglo XVIII [6].
Por cierto, corre la leyenda de que el nombre de Frailes viene de Fraude, por los muchos robos que se cometían en la zona. La idea es de Pascual Madoz en su Diccionario. Creemos del todo falsa, pues el ministro Madoz nunca estuvo en la zona, al menos así lo atestiguan los libros de actas del Ayuntamiento alcalaíno, pues no hay ninguna referencia a que personaje tan principal visitase la ciudad, y que luego recoge Enrique romero de Torres en su Catálogo. Afirmación carente de toda demostración documental e histórica, por lo que hemos demostrado en este breve estudio.
NOTAS:
[1] MURCIA CANO, María Teresa. Alcalá la Real. Claves de su historia. Alcalá Grupo Editor. Alcalá la Real 2006
[2] JIMÉNEZ MATA, María Carmen. La Granada Islámica. Contribución a su estudio geográfico-politico-adminitrtivo a través de la toponimia. Universidad de Granada. 1990
[3] CANO ÁVILA, Pedro. Alcalá la Real en los autores Musulmanes. Diputación Provincial de Jaén. 1990
[4] CARRIAZO, Juan de Mata. Hechos del Condestable don Miguel Lucas de Iranzo (Siglo XV). Marcial Pons Ediciones de Historia. 2010. Y http://fondosdigitales.us.es/fondos/libros/9248/3/hechos-del-condestable-miguel-lucas-de-iranzo-manuscrito/
[5] GUARDIA CASTELLANO, Antonio. Notas para la historia de Alcalá la Real. Edición facsimil. Alcalá la Real 1913.
[6] MURCIA CANO, María Teresa. La memoria del Agua. Apuntes para la historia del Balneario de Frailes (Jaén). Ayuntamiento de Frailes. 2015
Fuente: http://cronistafrailes.es/