POR MANUEL GARCÍA CIENFUEGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN (CÁCERES)
“Muy pronto comenzará un período de lucha incesante, de batallar continuo, sin tregua y sin descanso, activo y sin desmayo. Los desheredados de la fortuna, los que chorrean sudor en verano y acuden en invierno a las plazas de las aldeas con los miembros entumecidos por el frío y la vigilia en busca de un mísero jornal, sostendrán en Cuba el honor de nuestra bandera”.
(Tomado del Semanario “La Cotorra”, 22/X/1895, núm. 39. Su administración estaba en la calle Mérida, 42 de Montijo. Su fundador e impulsor fue Juan Antonio Codes Rodríguez, republicano, masón, concejal y teniente de alcalde).
A aquellos soldados montijanos, desheredados de la fortuna, se les hizo un homenaje el pasado viernes, 29 de marzo, con el descubrimiento de un monolito en el parque Miguel Merino Rodríguez. Sus nietos, biznietos y familiares agradecieron que se dignificara la memoria de ellos. ¿Por qué no se les iba a dignificar?