ADIÓS AL PRIMER ALCALDE AGUILUCHO DE LA DEMOCRACIA
EL CRONISTA OFICIAL DE AGUILAFUENTE (SEGOVIA) DESTACA LA VOCACIÓN SOCIAL DE RICARDO CASADO, FALLECIDO A LOS 85 AÑOS
El día 4, a los 85 años, la villa de Aguilafuente perdió a uno de sus vecinos más significativos de los últimos setenta años: Ricardo Casado González. Sus padres, Antonio y Dolores, vendedores de telas, se establecieron en Aguilafuente a comienzos del siglo XX desde la pequeña población zamorana de Letrillas, perteneciente al partido judicial de Puebla de Sanabria, que hoy cuenta con tres habitantes y depende del Ayuntamiento de Espadañedo. «Siempre se les conoció como ‘los zamoranos’. Tuvieron nueve hijos, siendo Ricardo, nacido en Aguilafuente, el que ocupó el puesto sexto», recuerda el cronista oficial de Aguilafuente, Juan Jesús Díez Sanz.
Desde muy pequeño, Ricardo ya acompañaba a sus padres y hermanos en la venta ambulante de paños por la provincia de Segovia. «El contacto con la gente forjó un carácter social y abierto a los temas comunes, siendo muy aficionado al ciclismo, que no se le daba mal, de ahí su apodo de ‘Minuto’, creando y colaborando con el equipo local de Aguilafuente en la organización de numerosas carreras ciclistas junto a su cuñado Ricardo Alonso que también nos dejó hace poco por culpa del coronavirus que estamos padeciendo», señala el cronista de la localidad.
El club de futbol El Águila fue otra de las aportaciones del fallecido en sus años de juventud y posteriores. «Sin apenas medios se desplazaban a otras localidades, con sus propios recursos y tiempo, fichando a jugadores de otras poblaciones que había que traer y llevar». Díez Sanz explica que el 19 de abril de 1979, «esa vocación social por todo lo que era levantar Aguilafuente y sus gentes se materializa en el nombramiento, ni más ni menos, de primer alcalde de la democracia. Con él se cierran los enfrentamientos y rencores de tiempos de la Guerra Civil y se comienza a trabajar por un futuro común para toda la población».
