POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
¡Menudo revuelo se ha levantado en «Veranos en Colunga» a cuenta del nombre de LA GRIEGA para una playa local, una zona costera en la parroquia de Duz, unas vivencias de verano… y hasta para alguna leyenda como la que nos contó Gema García López!
Haciéndome eco de la interpretación legendaria de Gema, les ofrezco mi versión sobre el asunto.
Verán ustedes:
Si el Sol, como dice Plinio, fue considerado y proclamado «principale naturae regimen ac numen» y Cicerón lo definía como «mens mundi et temperatio», la LUNA encierra y resume en su esencia la idea universal de amor, de fertilidad y de fecundidad. En ella se localiza esa divinidad femenina que atesora secretos y dones de amor, de belleza, de hermosura, de tierras y demares… Es la que nace (genos) de la blanca espuma (aphros) del oleaje marino, la que navega por el mar sobre una concha de vieira que con su quilla dibuja (dyte) estelas infinitas.
Esa es la griega AFRODITA, a la que los romanos llamaron Venus, la diosa del amor y de la belleza, del mar y de los navegantes, de la fecundidad y de la vida universal.
La diosa griega que cantaba Rafael Alberti:
«Vamos, amor, por calles que se fueron.
por claras geometrías que llevaban
al misterioso amor, a los placeres
vedados, pero dulces en la noche.
Esta es la casa de la diosa. Aspira
por los azules ámbitos su aroma
a espuma marinera, a los jazmines
y claveles salados de tu cuerpo.
……..
Afrodita, en penumbra, se sonríe
sintiendo el mar batirle entre los muslos»
Afrodita, la guapa moza griega, diosa seductora, que en tiempos muy lejanos llegó navegando en su concha de vieira al arenal donde desemboca el río Libardón y allí, entre olas, arenas, espuma y sal, encontró su reino de paz y de felicidad.
Desde entonces los colungueses, en honor a la diosa, titularon a su arenal como PLAYA DE LA GRIEGA. En esa expresión se resumen otros nombres: «PLAYA DEL AMOR», «PLAYA DE LA BELLEZA» , «PLAYA DE LA FELICIDAD»…
Esa es la leyenda que pone marco de fantasía a una de nuestras playas colunguesas.
Y ya que hablamos de vieiras, molusco bivalvo muy caro, vamos a preparar unos MEJILLONES PICANTINOS que, también bivalvos, son más baratos y un «pelín afrodisíacos».
Abran al vapor, con un vaso de vino albariño en la cazuela, 1,5 kg de mejillones de máxima calidad y tamaño. Separen media concha y dejen cada mejillón en su otra media concha, colocados ordenadamente en una cazuela de barro.
Aparte, en sartén con aceite, hagan un sofrito con un diente de ajo, media cebolla, unas ramitas de perejil y una guindilla de las llamadas de Cayena. Añadan un vasito de fino andaluz, y un poco de harina desleía en medio vaso de caldo de pescado o en el agua de abrir los mejillones. Den unos hervores.
Cubran los mejillones con esa salsa y den otros hervores para que se complementen los sabores de salsamento y marisco.
Sirvan muy calientes en la misma cazuela y acompañen con un buen albariño o unos culinos de excelente sidra asturiana. (Por favor, no digan «sidrina» ni «sidriña», ni «culines»).
¡Feliz estancia en la PLAYA DE LA GRIEGA, arenal que escogió AFRODITA para su descanso en Colunga!