POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
Hay aniversarios insoslayables y hoy celebro que hace veinte años, el 17 de enero de 1997, publiqué en este periódico, en Cartas al director (era el director Isidoro Nicieza), la primera columna de mi vida; la titulé “Pravia, lo juro”, aproximadamente con el mismo número de palabras que estos billetes de La mar de Oviedo. Desde entonces siguieron cinco mil, de todo tipo, en secciones variopintas, diferente extensión y total libertad de opinión. Si yo mismo repasara ahora lo que escribí… me llamaría a capítulo; no por haber dicho algo en contra de mis principios y manera de ver las cosas, sino por manifestarme con el descaro de quien escribe un diario para guardar en el cajón. En suma: no me corté, ni me cortaron. Y aunque recibí algunas críticas, fueron muchos más los silencios, clamorosos silencios que acompañan a todo escritor auténtico que cultiva sus defectos.
Fuente: http://www.lne.es/