POR JOSÉ MARÍA GOLDEROS, CRONISTA OFICIAL DE GRIÑÓN (MADRID)
El Rey Alfonso X de Castilla, llamado “el Sabio” (Toledo, 23 de noviembre de 1221, Sevilla, 4 de abril de 1284), fue rey de Castilla y de los demás reinos con los que se intitulaba entre 1252 y 1284. A la muerte de su padre, Fernando III «el Santo», reanudó la ofensiva contra los musulmanes frente a una revuelta de los mudéjares de Murcia. Como hijo de Beatriz de Suabia, aspiró al trono del Sacro Imperio Romano Germánico, proyecto al que dedicó más de la mitad de su reinado sin éxito alguno. Los últimos años de su reinado fueron especialmente sombríos, debido al conflicto sucesorio provocado por la muerte de su primogénito Fernando de la Cerda, muerto en Villa Real (Ciudad Real) en 25 de julio el 1275, fecha esta última probablemente equivocada, pues numerosos cronistas la sitúan en agosto. Alfonso X, murió en Sevilla durante el transcurso de una revuelta, habiendo desheredado a su hijo Sancho.
En cuanto a aspectos administrativos llevó a cabo una activa y beneficiosa política económica, reformando la moneda y la hacienda, concediendo numerosas ferias y reconociendo al Honrado Concejo de la Mesta.4También es reconocido por la obra literaria, científica, histórica y jurídica realizada por su escritorio real. Alfonso X patrocinó, supervisó y, a menudo, participó con su propia escritura y en colaboración con un conjunto de intelectuales latinos, hebreos e islámicos conocidos como la Escuela de Traductores de Toledo, en la composición de una ingente obra literaria que iniciaba en buena medida la prosa en castellano.
Elaboró de su pluma las Cantigas de Santa María y realizó así un gran aporte a la lengua culta del momento en la corte del reino: el galaico-portugués, que por su noble autor fue perdurado. En la historia de Castilla, consta que el rey Alfonso X el Sabio, mandó fundar Villa Real, actual Ciudad Real, fundado en Pozuelo de Don Gil en 1255. Se estableció con el fin de contrarrestar el poder que la Orden de Calatrava ejercía en la comarca.
Alfonso fue el rey que quiso ser enterrado en tres sitios distintos. Había muerto en Sevilla el 4 de abril de1284 y fue coronado frente a la tumba de su padre Fernando III. Su sepulcro se halla en la capilla Real de la catedral sevillana, frente a la de su madre Beatriz de Suabia. Había ordenado D. Alfonso levantar el primer templo de Murcia en el que en el momento de edificarlo, manifestó que quería ser enterrado allí (aunque luego no fue así)
Un cáncer en el rostro condicionó la política del rey. En efecto, el cáncer maxilofacial le afectó el área inferior del ojo izquierdo ocasionándole grandes dolores, que bien pudo ocasionar las decisiones que tomó durante su reinado.
Un cráter en la Luna lleva su nombre. Se le reconoció su interés por la astronomía del rey de Castilla, nombrando en su honor el cráter lunar “Alphonsus”. El cráter presenta un diámetro de 119 kilometrros. y una profundidad de 2,7 km. El rey abría la primera Universidad europea en Salamanca, por Real cédula del 9 de noviembre de 1252.
Desde su juventud, antes de 1252, fecha en que fue coronado rey, el príncipe Alfonso, además de escribir cantigas en galaico-portugués y probablemente, algunos himnos en honor a la Virgen María, también auspicio la traducción de un libro de cuentos infantiles en castellano. Ya mayor mandó llamar a su Corte a trovadores que escribían en gallego-portugués, en catalán, francés…
Así fue nuestro fundador Alfonso X, que además de señalar el futuro de Ciudad Real, otorgó grandes facilidades para lograr atraer a los nuevos moradores, entre ellos a los judíos a los que favoreció.
FUENTE: J.M. G.V.